Huelga de los jueces en España
Algunas asociaciones de jueces en España pretenden ponerse en huelga el próximo 18 de febrero. Puede que algunas de sus reivindicaciones -aumento de recursos, mejoras laborales, económicas- sean justas, pero ¿puede todo un poder del Estado ponerse en huelga? Es como si Zapatero y sus Ministros decidieran no acudir a trabajar, dejando el país en desgobierno, en protesta por la actuación de los jueces ¿no sería una locura?
Pocos van a entender esta huelga. La sospecha de que la misma tiene motivaciones más políticas que laborales está extendida. Y existen razones para la reticencia, pues los ciudadanos seremos los primeros afectados por el paro. ¿Como es posible que se conculquen así los derechos de los españoles? Además, el CGPJ, órgano de gobierno de los jueces, lleva demasiado tiempo jugando a política: criticando leyes progresistas, sirviendo de ariete para el PP.
En los comentarios de la noticia en El Pais.es se percibe el malestar:
«Hay gente que no terminan de creerse que el poder está en las urnas y no en los poderes fácticos del Estado. […] Una cosa es negociar y otra chantajear a la representación popular en la cortes de la que emanan en el ejecutivo y judicial. […] ya nos gustaría a muchos ciudadanos vivir como viven algunos jueces, en mi empresa si cometo una falta grave, me envían al paro directamente…
Se ha argumentado que uno de los detonantes para ir a la huelga ha sido el caso Tirado. Los jueces dicen sentirse indefensos. Tienen escasez de medios pero se les exige «responsabilidades», protestan. (La inacción del juez Tirado dejó libre al asesino de la niña Mari Luz. Fue multado por ello, pero la pequeña cuantía de la multa provocó un gran revuelo).
Todo indica, sin embargo, que lo que realmente ha levantado a los jueces han sido los proyectos de Ley que el gobierno llevará este año al parlamento. Uno de ellos traslada la Instrucción Judicial a la Fiscalía. El juez perderá esa pequeña parcela de poder sobre el caso pero haría que los ciudadanos fueran investigados por un órgano diferente al que los juzga. En casi todos los paises de nuestro entorno, salvo en Italia, se está implantando ese modelo, que parece más garantista, más acorde al mundo en que vivimos. Pero aunque no lo fuera, ¿es aceptable que los jueces traten de imponerse sobre las Cortes?
No dudo de que haya jueces al margen de esta batalla política, que sólo piden mejoras. Pero deben ser muy cuidadosos con los términos de la negociación. Recuerden: es aceptable que los trabajadores de Iberia salgan a manifestarse, pero se convierte en delito cuando deciden cortar las pistas de aterrizaje del aeropuerto.