¿Medios de pago en Internet?
La pasada semana en el programa «La octava planta» (Puri Beltrán, en la SER, lun-vie 21:00-23:00) tuvimos la oportunidad de conversar sobre la conveniencia o no de cobrar por los contenidos en Internet. Participamos Ícaro Moyano -tuenti.es-, Gumersindo LaFuente -soitu.es-, Oscar Espiritusanto -periodismociudadano.com- y yo .
Resulta que el Grupo Murdoch ha anunciado que cobrará por el acceso a sus medios en Internet. Recordemos que entre sus posesiones están The Times, The Sun, News International, el americano The New York Post, la cadena Fox News, el estudio 20th Century Fox, My Space y The Australian, ¿le funcionará?
El debate no es sencillo. El sector está en pleno desarrollo y todo está por inventar. Las fórmulas que no sirvieron para unos quizá sí lo hagan para otros. Todas son posibles, y todas pueden convivir. Es, por tanto, un asunto en el que es peligroso ser dogmático y donde existen más preguntas que respuestas.
De lo que no cabe duda es de que en la crisis de la prensa se han solapado muchas crisis: la económica, la provocada por la evolución tecnológica, la de la aparición de nuevos operadores y la de la pérdida de poder político. Este último es un asunto francamente interesante. Los medios de comunicación están perdiendo el grado de interlocución que tenían entre la sociedad y la política o la empresa. Eso les proporcionaba no pocos réditos. Habida cuenta de que los medios de comunicación son cada vez más numerosos y atomizados, la prensa tradicional pierde gran parte de la capacidad que tenía para marcar la agenda política. La opinión pública es un nuevo poder, con herramientas propias, dificil de manejar. Sea como fuere, «si los medios hubieran hecho bien sus deberes y hubieran invertido los beneficios logrados en estos años para prepararse, como señaló Gumersindo, ahora el escenario sería bien distinto».
La primera cuestión, eso sí, es que Murdoch tendrá que ofrecer algo verdaderamente diferenciador si quiere que sus medios sobrevivan. Tal y como apuntaba ayer Ícaro Moyano, «tendrá que ofrecer algo más que la información: el empaquetado, el tono, una marca solvente»…
Porque además con la irrupción del periodismo ciudadano, como ilustraba Oscar, los lectores tienen a su disposición miles de testigos directos, armados con una cámara en el teléfono móvil con capacidad para emitir en directo para todo el planeta.
Dice Murdoch que el buen periodismo es caro. Quizá sea verdad -y no será por lo que se paga por él- . Pero está por ver que los beneficios que generen esos medios se traduzcan en mejoras infromativas y no sólo sirvan para engordar el bolsillo de los accionistas. Es más probable que tenga más que ver con lo segundo.
Sea como fuere, en los medios de comunicación estamos viviendo una profunda transformación. En algunos casos provocará problemas a las empresas y sus accionistas, pero todo apunta a que los ciudadanos tienen mucho que ganar, así que deberíamos estar celebrándolo.