El 26 de abril de 1986 tuvo lugar el considerado peor accidente nuclear de la historia en la central Vladímir Ilich Lenin, en el norte de Ucrania. Se cumplen ahora 35 años de la catástrofe de Chernobyl que suele también incluirse entre los grandes desastre medioambientales de la historia. El exdirector de Greenpeace y diputado de Unidas Podemos, Juan López Uralde, analizó en La Cafetera de Radiocable.com las lecciones sobre la energía nuclear en el 35º aniversario del accidente y resalta «los daños están ahí, a pesar de que a lo largo de la historia se ha intentado lavar la imagen de la energía nuclear».

(Foto: Flickr/Irishroadrunner)

Uralde recuerda que «en aquellos años el argumento de los defensores de la energía nuclear es que se llamaba el Síndrome de China, la fusión del núcleo del reactor, nunca podría ocurrir… pero ocurrió. Los detractores de la URSS culparon a su tecnología, pero lo cierto es que ocurrió. Y se volvió a repetir en 2011 en Fukushima. Y evidenció que uno de los problemas más graves de la energía nuclear es la inseguridad».

Añade que durante años se ha intentado blanquear lo sucedido en Chernobyl y se refiere en concreto al colectivo de los liquidadores los «grandes olvidados» de la catástrofe: «se ha hablado muy poco de ellos, pero se calcula que fueron más de 600.000 personas que participaron en el enterramiento del reactor. Y nunca hubo ni un censo, ni un seguimiento sobre su salud. Esto ha hecho que haya habido un blanqueamiento sobre el número de víctimas en Chernobyl, porque los liquidadores no han entrado en las cifras oficiales de la catástrofe».

Con motivo del 35 aniversario del desastre, se han recuperado algunos documentos aún poco conocidos, como por ejemplo algunas de las primeras fotografías de la central al día siguiente del accidente que tomó el fotoperiodista Igor Kostin y que ha publicado la BBC. En algunas se puede ver a las personas que trabajaron en la extinción del fuego y la limpieza del reactor

Juan López de Uralde insiste en La Cafetera en que a pesar de que los riesgos de la energía nuclear se llevan debatiendo muchos años: «los problemas siguen ahí y no se han resuelto. Los residuos nucleares por ejemplo sigue sin resolverse. Se habla de distintas tecnologías, pero de momento siguen siendo un problema para la sociedad porque no se sabe qué hacer con ellos».

Pero enfatiza: «lo cierto es que la energía nuclear está en declive en todo el mundo. Cada año se cierran más reactores de los que se abren. Y el motivo es también económico, porque no compensa. Si lo hiciera se estarían construyendo nuevas centrales nucleares, porque no existe ninguna cortapisa legal. Pero a ninguna empresa le interesa, porque la realidad es que las renovables son cada día más rentables».

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