España ocupa el puesto 18 en el ranking de mejores democracias de The Economist
Por tercera vez, el semanario británico publica su Indice de democracia que mide la calidad de esta forma de gobierno en el mundo. A nivel general, The Economist considera que la democracia está en declive. Con respecto a España, le otorgan el puesto 18 de la lista, justo por detrás de EEUU y delante del Reino Unido. El estudio se cerró en noviembre de 2010 y por tanto no ha tenido en cuenta las revoluciones en el mundo árabe… y Europa.
El Indice de Democracia lo elabora la llamada Unidad de Inteligencia de The Economist. Analizan cinco apartados para elaborarlo: proceso electoral y pluralismo, libertades civiles, funcionamiento del gobierno, participación política y cultura política. Los países se catalogan en función de estos indicadores en cuatro tipo de regímenes: democracias plenas, democracias imperfectas, regímenes híbridos y regímenes autoritarios.
Y en 2010, el semanario británico considera que hay en el mundo 26 democracia plenas (que suponen un 15% del total de 167 países estudiados), 53 democracias imperfectas (31,7%), 33 regímenes híbridos (19%) y 55 regímenes autoritarios (33%). Y destacan retrocesos democráticos en Oriente Medio, la ex Unión Soviética y el Africa sub-sahariana.
España aparece en el puesto 18 (al final de la lista de las democracias plenas) con una puntuación total de 8,16. Recibimos una excelente nota en proceso electoral y pluralismo (9,58) y en libertades civiles (9,41). Buena en funcionamiento del gobierno (8,21) y flojeamos algo más en cultura política (7,50) y sobre todo en participación política (6,11).
El ranking está encabezado por Noruega, seguida de Islandia, Dinamarca, Suecia y Nueva Zelanda. Y llama especialmente la atención que para The Economist algunos países tan importantes de la UE como Francia o Italia no están integrados en el grupo de democracias plenas, sino en las imperfectas.
Explican que «unas elecciones libres y justas asi como las libertades civiles son condiciones necesarias para una democracia, pero no siempre son suficiente para tener una democracia plena y consolidada si no están acompañads por transparencia y un gobierno al menos minimamente eficiente, una participación política suficiente y una cultura política pro-democrática. No es fácil construir una democracia sólida. Incluso en las de más larga vida, si no se la nutre y protege, la democracia se puede corroer». [visto aqui]