Descubrimos a Ramiro, un oyente entre aves, y nos visita Iñaki de la Torre con su ‘retrasillo’ musical |SOBREMESA CAFETERA|

Tocar fondo para cambiar de vida. Eso es lo que hizo Ramiro, oyente de La Cafetera, abandonar un trabajo para perseguir su sueño. En este caso el de la ornitología. Su historia, protagonista de este episodio de La Sobremesa Cafetera, comenzó como lo hacen todas: por el principio. Nacido y criado a la vera de Barcelona, en Santa Coloma de Gramenet, adoraba meterse a los animalillos en el bolsillo y llevarlos a casa, con alguna que otra reprimenda por el camino, claro.

Un día, decidió llevarle a su madre unos huevos de serpiente. La respuesta fue «o los huevos o tú, pero aquí no entráis los dos». Y Ramiro se lo pensó.

Desde entonces, toda su vida ha estado ligada a la naturaleza: quiso estudiar biología pero no le dio la nota y decidió embarcarse en los trabajos más variopintos, desde jardinero hasta vigilante forestal, para acabar terminando en un centro especial de trabajo con personas con discapacidad, donde acabó conociendo a su mujer. Un trabajo que acabó desgastándolo y que lo llevo a dejarlo todo para dedicarse al avistamiento de aves.

Tras los pájaros la música, pues en este capítulo Iñaki de la Torre -artífice de ‘El coleccionista de canciones’- se ha pasado por el estudio cafetero para hablar de ritmos latinos y enseñar a los cantautores españoles como hacer una buena balada con su truco de ‘el retrasillo musical’. También han desfilado por el estudio  las voces de Elvis Presley, John Lennon o Paul McCartney en una edición dedicada a la música.

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