Deuda saldada
Iñaki Gabilondo en Noticias Cuatro: «Estar en desacuerdo por obligación es ridículo y puede ser peligroso. Veamos. Los Reyes van a Ceuta, no habían ido nunca. Durante décadas, la derecha se ha desgañitado hablando de la españolidad de Ceuta y Melilla, de nuestra obligación para con ellas. Hoy por fin se ha producido la visita y, como la ha organizado el Gobierno Zapatero, la derecha se tiene que alegrar con sordina. Tanta exaltación patriótica, tanta bandera, tanta España y no poder echárselas a la cara al presidente. Y algo aún peor, sólo gracias al superávit de la buena relación actual Madrid-Rabat, puede plantearse esta visita Real y controlarse razonablemente el esperable disgusto marroquí. ¿Se imaginan si se le ocurre organizarlo a Aznar, que vivía en gresca permanente con Marruecos?. Rabat lo hubiera considerado ofensa insoportable. Pero decíamos que el desacuerdo sistemático puede llegar a ser peligroso. Hace tres días, Al Zawahiri pidió a los yihaddistas que atacaran a España. He aquí una verdadera autoría intelectual en busca de autores materiales. Con la experiencia vivida, cabría esperar que la oposición, en bloque, hiciera piña con el gobierno para afrontar la amenaza. Pues por el momento no; el primer partido de la oposición se resiste a soltar las amarras que le atan a algunos de sus dirigentes más apolillados y, sobre todo, a sus preceptores editoriales. ¿Va a seguir husmeando la nada?. Esperemos que no. De lo contrario sería discrepancia temeraria.»