«Puerca», «guarra» y «zorra». Así calificó el tertuliano de Intereconomía a una consejera catalana que impulsó cursos de educación sexual para jóvenes. Eduardo García Serrano fue denunciado. Y la denuncia no tardó en surtir efecto y García Serrano pidió rápidamente disculpas a la consejera, a la cadena, a los anunciantes y a su padre… En su disculpa, García Serrano dijo, entre otras cosas:

«Soy un hombre y soy católico […] A partir del jueves pasado a usted le están presentando a un Eduardo García Serrano, en la práctica totalidad de las tribunas y de los foros periodísticos de España, que es un auténtico canalla y un auténtico monstruo. Yo no le pido que me crea, le pido unos mendrugos de su tiempo para que me escuche unos minutos […]  Necesito que usted me perdone para volver a sentirme limpio. Es una sensación tremenda ¿eh? […]

[…] Yo, periodísticamente, no soy gran cosa, pero mi padre si era un auténtico maestro en periodismo: Rafael García Serrano.

Yo sé que las palabras que pronuncié, allá donde el está, que no es otro sitio que el cielo, pues, le hirieron tanto como a usted, pues están diametralmente alejadas del estilo que el me enseñó y que, evidentemente, no aprendí en profundidad. […]

«Evidentemente», sí, no aprendió en profundidad.
A la vista de los audios que almacena la red, así es. Allí han empezado a brotar como setas otros fragmentos de programas en los que ha participado [visto aquí]: