Educación para la ciudadanía
Los padres se manifestarán este otoño si el Gobierno no retira la asignatura para la Ciudadanía -dice La Razón-. El presidente de una plataforma ciudadana que se opone a ser mejor ciudadano, dice que ya tienen 13.000 objetores y que podrían tener más… Bueno, en un país que supera los 45 millones de habitantes, que 13 o 26 mil prefieran ser malos ciudadanos, no es motivo precisamente de alarma:
«…Profesionales por la ?tica, la plataforma promotora de la oposición de las familias a la asignatura, prefieren seguir combatiendo con las objeciones de conciencia […] Una cifra que, a juicio de su presidente, Jaime Urcelay, «podría duplicarse en las primeras semanas de septiembre», cuando los centros escolares abran de nuevo sus puertas.
Asimismo, Urcelay piensa recurrir al Parlamento Europeo […] «Estamos ultimando un informe donde se analiza la asignatura en toda Europa y en nuestro país, y se demuestra que no son materias comparables.[…] El estudio al que se refiere, adelantado por este periódico, señala que España es el único país en el que «la moral» entra en las aulas de la mano de la polémica materia. Además, revela que sólo en Rumanía y en algunas partes de Bélgica, además de en nuestro país, la asignatura es obligatoria también en la enseñanza Primaria. [sigue en La Razón]
Es interesante la apostilla final cuando dice que «España es el único país en el que la moral entra en las aulas» contradiciéndose después al hablar de Bélgica y Rumanía y olvidándose de que las normativas europeas «obligan a que la escuela debe educar a los niños de tal modo que cuando acaben sus estudios se comporten como ciudadanos que respetan las leyes y las normas de la sociedad en la que viven», como se encarga de recordarnos la prensa extranjera. Pero la cosa es darle a Zapatero, que está de moda.