El caso Roca y otras fianzas polémicas
El último caso ha sido el de Juan Antonio Roca, imputado por corrupción en Marbella, cuya salida de la carcel es posible gracias a la fianza de un millón de euros reunida por su familia. Dicen que han tardado 20 días en poder hacerlo debido a «las reticencias» de los bancos. Pero el pago ha sido por transferencia y desde una cuenta bancaria donde ha quedado constancia del origen de las distintas aportaciones.
El propio Roca ya vivió una situación similar en 2002, cuando sus amigos y allegados reunieron 450.000 euros para sacarle de la carcel por otro caso durante la Era Gil. Entonces tardaron solo 24 horas.
El suyo es uno más de los numerosos nombres conocidos que han tenido que hacer frente a una fianza millonaria para eludir o salir de la carcel. A sus allegados les supone más o menos trabajo reunir el dinero, pero a pesar de que en muchos casos están acusados de delitos económicos… siempre lo consiguen.
Mario Conde fue uno de los casos más sonados. Sus fianzas -porque afrontó varias-fueron de las más elevadas al menos en principio. En 1995, 2.000 millones de las antiguas pesetas cuando se inició el caso Banesto, en 1997 otros 2.000 por Argentia Trust y en 2000, 500 millones más tras la sentencia de la Audiencia Nacional. Aunque estas cantidades fueron luego rebajadas. Con todo Conde tuvo que pedir prórrogas para reunir el dinero.
Jesus Gil también pudo reunir, en su caso con bastante rapidez, los 700.000 euros que el juez dictó como fianza para que pudiera salir de la carcel en 2002.
Isabel Pantoja, también implicada en el caso Malaya, tuvo que hacer frente a una fianza de 90.000 euros que reunió enseguida y que fue llevado al juzgado «envuelto en papel de periódico», segun informó La Vanguardia.
Arnaldo Otegui fue otro de los nombres conocidos que tuvo que hacer frente a una cuantiosa fianza, 400.000 euros para salir de la carcel en 2005, aunque en su caso el delito no fuera económico. El aval para la fianza vino de Caja Laboral. Posterioremente Garzón rebajó la cantidad a 65.000 euros.
Javier de la Rosa, financiero catalán salió de la carcel en 2000 tras pagar una fianza de 100 millones de la antiguas pesetas. Se benefició de una sustancial rebaja, ya que en principio el Juez había fijado el precio de su libertad en 1.000 millones.