La Revolución de Asturias ha cumplido 90 años y muchos la han recordado como un faro en la lucha contra el fascismo, en un momento en que el revisionismo de la derecha ha puesto el foco en ella. Pero aún hay muchas historias relacionadas con esta revuelta que permanecen casi desconocidas. Como la de Ricardo de la Puente Bahamonde, primo de Franco que se negó a bombardear a los mineros y que en 1936 permaneció fiel a la República y fue fusilado por orden de su primo. Emilio Silva, presidente de la ARMH ha recordado en el programa La Cafetera de Radiocable.com su figura.


Emilio Silva explica recuerda que la Revolución de Asturias es utilizado por algunos autores revisionistas para «quitarle a Franco la responsabilidad del inicio de la Guerra Civil» y se califica de golpe de Estado «cuando no tuvo nada que ver». Pero subraya que en esta revuelta «por primera vez el Ejército bombardeó población civil en España» y resalta que Francisco Franco quien dio la orden de bombardear a los mineros de Asturias, la dio Francisco Franco Aunque enfatiza que hubo historias de gente que «merecerían varias películas» que se negó a participar en este bombardeo. Y en concreto resalta la de Ricardo de la Puente Bahamonde.

Se trata de un primo carnal de Franco, ya que las madres de ambos eran hermanas «y se criaron casi juntos, como hermanos». Una sobrina de Franco recordó incluso en sus memorias que, dado que Ricardo era republicano, en una ocasión, siendo ya general el dictador, bromeó diciendo que quizá tendría que fusilar su primo algún día. «Y así lo hizo con total frialdad», apunta Silva.

Ricardo de la Puente Bahamonde no sólo no se sumó al golpe de Estado que dio su primo en julio de 1936, manteniéndose leal a la República, sino que para evitar que los aviones y armas del aeródromo de Tetuán del que era comandante, pudieran ser usados contra el gobierno legal, ayudó a inhabilitarlos. «El general Sáenz de Buruaga le comunicó a Franco en Tetuán la lista de los militares que habían destruido, antes de ser detenidos, varios aviones y ametralladoras y que iban a ser fusilados el 4 de agosto de 1936. Y entre ellos estaba su primo Ricardo… que fue ejecutado en el día previsto».

Aunque el presidente de la ARMH recuerda que antes, en 1934, Ricardo de la Puente Bahamonde «ya había hecho algo que avergonzó al joven general Franco. Era el responsable del aeródromo de Virgen del Camino, a pocos kilómetros de León. Y cuando empieza la Revolución de 34, llega una orden al aeródromo de que carguen bombas en los aviones y las lancen contra población civil. Pero dado que muchos soldados eran asturianos, se negaron a hacerlo. Y Ricardo de la Puente, que era un humanista, llegó a un acuerdo con ellos para que carguen los aviones con bombas para evitar que les hagan un consejo de guerra, pero les garantiza que bombardeará mal, para no matar población civil. Y cumple ese acuerdo».

Y a pesar de que las ordenes de la represión a los mineros asturianos las dio su primo Francisco Franco, Ricardo de la Puente y sus pilotos no bombardearon a población civil, ni los objetivos marcados. Emilio Silva recuerda que eso motivó que fuera detenido, junto con varios soldados, juzgado y condenado a cárcel en Jaca, pero tras ganar el Frente Popular las elecciones en 1936, es amnistiado. «Cuando Ricardo y los soldados regresaron a León fueron recibidos como héroes por haberse negado al salvajismo militar jugándose la pena de muerte por defender los derechos humanos».


[Intervención completa de Emilio Silva]

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