El norteamericano Washington Post lleva de nuevo a sus páginas la disputa entre el Rey Juan Carlos y el Presidente venezolano Hugo Chávez. En el artículo escrito por una de sus columnistas, se advierte de que «las clases marginadas» han percibido el suceso como un éxito. La columnista, incluso, celebra que la monarquía se diluya en latinoamérica…

�??El Rey Juan Carlos -dice- hizo feliz a muchas personas cuando mandó callar al presidente venezolano Hugo Chávez. Pero para muchos en las clases más marginadas de Iberoamérica, el incidente les demostró que políticamente habían triunfado. El hecho de que haya sido un rey, y no el presidente de otro país, quien haya dicho a Chávez que se callara ha aumentado el sentimiento de satisfacción entre los seguidores de Chávez, debido al trasfondo colonial y a la historia de la España imperial en la región. Hoy por hoy, no obstante, no es tan negativo �??quizás incluso sea un indicio del éxito de la democracia- que haya quien considere el incidente Juan Carlos Chávez como una victoria del �??más débil�??. Después de todo, parece totalmente apropiado celebrar que la línea de sangre de una familia real española esté cada vez más diluida entre las clase dirigentes en Iberoamérica�?�.