Empiezan a pedirse explicaciones
Iñaki Gabilondo en Noticias Cuatro: «Una nota sobre la crisis financiera, que hoy parece tomarse un pequeño respiro pero que nadie da por acabada, ni mucho menos. Las cabezas más lucidas del periodismo mundial siguen estupefactas ante la magnitud de la catástrofe y ante las nacionalizaciones que han resultado la única solución, pero ya hoy observamos un pequeño giro.
Empiezan a pedirse explicaciones, y con mucha dureza. No sirve el reproche genérico de «voracidad, avaricia, malas prácticas, excesos» y aparecen acusaciones con nombres y cifras. Y en periódicos nada amarillos (Le monde, New York Times, The guardian…). Ejemplo, Stanley O’neill, presidente de Merrill Lynch desde 2003 y que fue despedido en octubre pasado con la módica gratificación de 160 millones de dólares (unos 18.000 millones de pesetas). O Martin Sullivan, director general de AIG, empresa que ha tenido que ser nacionalizada, y que se retiró hace tres meses con un cheque de 68 millones. O lo más sangrante, el año pasado, 2007, a pesar de la crisis de las subprimes, los bonus obsequiados por cinco primeros bancos de los Estados Unidos a sus ejecutivos alcanzó la monumental cifra de 66.000 millones de dólares. Así que nuevos controles, sí, reflexiones sobre sistemas y modelos, sí, pero se piden investigaciones a fondo, y explicaciones a personas y a instituciones. ¿Qué ha estado haciendo el fondo monetario internacional?»