Dos ejemplos de malos estudiantes convertidos en emprendedores de éxito
El sistema de educación español es a menudo señalado como una de las causas del escaso espíritu emprendedor que hay en nuestro país. Fernando Montero recoge desde su blog como ejemplo de esta idea -que los baremos educativos desmotivan a la gente de talento- el caso de dos emprendedores de éxito Didac Lee de Grupo Inspirit y Pau García Milá de EyeOS, que destacaron por ser malos estudiantes.
El texto explica como Pau García Milá al poco tiempo de empezar la Universidad, fue expulsado ??por mal estudiante?. Sin embargo esto le hizo ponerse a programar en un sótano junto a unos amigos. Hoy, con 23 años, dirige una compañía de más de 30 empleados que ha triunfado a nivel internacional y tiene en su cartera de clientes a grandes empresas como IBM o Telefónica.
Por su parte, Didac Lee ha contado que: ??cuando estudiaba, mi madre me decía que era incapaz de estar delante del libro una hora; ahora puedo estar 15 horas seguidas trabajando delante del ordenador?. Y relata que se sintió muy desmotivado con los estudios de Ingeniería, que completó pese a que no le permitían dar rienda suelta a su vocación de innovador. Luego tuvo la suerte de concoer a los hermanos González Barros, lo que fue muy determinante para él en su desarrollo empresarial futuro.
El artículo también rescata fuera ya del mundo empresarial, el caso de Alejandro Amenábar, que desveló que suspendió la asignatura de cine en la Facultad de Ciencias de la Información. Eso si el director se vengó poniéndole al malo de su primera película «Tesis», el nombre del profesor que le suspendió.