España figura junto con Rumanía y Bulgaria, como los países con mayor número de situaciones considerada «críticas» según un cuadro de indicadores sociales publicado por la Comisión Europea. En concreto, para España se señala el abandono escolar prematuro, los «ninis» (jóvenes que ni estudian, ni trabajan) y el desempleo. En otro estudio de Education First, los españoles también salen malparados en cuanto a dominio del inglés ya que ocupan el puesto 34 a nivel mundial y en la cola de Europa.

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El informe conjunto sobre empleo de la CE de este año analiza aspectos como la educación, la brecha laboral entre hombres y mujeres, el apoyo público a las políticas sociales o el riesgo de pobreza y exclusión. Y España presentan evaluaciones «críticas», «a observar» o «débiles pero que mejoran» en diez o más de los indicadores.

Los peores registros -con la etiqueta de críticos- los recibe España en abandono escolar prematuro, la tasa de jóvenes «ninis» y porcentajes de empleo y desempleo. Mientras que en situación «grave» figuran los ingresos familiares disponibles brutos y el impacto de las ayudas sociales para la reducción de la pobreza. Unicamente Rumanía y Bulgaria tienen tantos registros preocupantes.

Entre las valoraciones positivas de la Comisión, España está entre los mejores en cuanto a porcentaje de niños menores de tres años que van a la guardería. Se encuentra además «mejor que la media» en porcentaje de población que ha optado por no recurrir a cuidados sanitarios por no poder cubrir ese gasto y en la media europea en la brecha laboral entre hombres y mujeres y nivel de competencias digitales. En cuanto al riesgo de pobreza o exclusión, España recibe la etiqueta de «a observar».

Por otro lado, otro estudio educativo ha vuelto a poner el foco en uno de los talones de Aquiles clásicos en España: el dominio de idiomas extranjeros. Según Education First, que cada año evalúa el manejo del inglés en el mundo por el resultado de las pruebas en 100 países, coloca a los españoles en un discreto 34º puesto global.

Este resultado coloca a España al mismo nivel que Nigeria y a la cola de Europa. Los españoles han obtenido, en la última edición, 537 puntos, 13 menos que la media europea. Es además, junto a Italia, el único gran país de la UE cuyos habitantes no tienen un dominio alto o muy alto del inglés. Aunque en este año, incluso Italia ha superado a España, y ocupa el puesto 30. Y es destacable el caso de Portugal, que en sólo una década ha pasado del puesto 15 al 7.

El estudio de Education First muestra que entre 2011 y 2014, los españoles realizaron un enorme avance en el dominio del inglés, pasando de un nivel bajo a uno medio alto. Pero desde entonces su puntuación se ha estancado, perdiendo diez puestos en el ranking mundial (del 24º al 34º).

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