España es el 5º mayor productor de largometrajes de animación del mundo y el 2º en Europa
Alrededor de 250 empresas se dedican a la animación en España y este sector facturó 654 millones de euros en el año 2017, lo que coloca al país como el quinto mayor productor mundial y el segundo a nivel europeo de este tipo de largometrajes. Esta industria, cuyo primer gran éxito y referente fue la saga de Tadeo Jones, acaba además de lograr un nuevo hito al conseguir que la película de animación «Buñuel en el laberinto de las tortugas» haya sido preseleccionada junto con las cintas de Pedro Almodóvar y Alejandro Amenábar, para representar a España en los Oscar.
El último Libro Blanco publicado por la federación Diboos de productores de animación y efectos visuales evidenciaba la buena salud de un sector que en 2017 ya daba empleo directo a 7450 profesionales y que ha seguido creciente desde entonces. De hecho de los 654 millones que facturó en 2017, las previsiones son que llegarán a los 1.000 millones de facturación en 2020 con una tasa de crecimiento anual del 24%.
A nivel mundial, España solo es superada por Estados Unidos, Canadá, Francia y Japón como productor de este tipo de contenidos. Y aunque la animación española sólo representa el 4% del sector audiovisual, genera el 20% del empleo y el 9% de la facturación total. Y es además el producto de mayor exportación en la industria. Series producidas en España se han emitido y emiten en plataformas y cadenas como Netflix, BBC, Discovery Kids, TF1, Televisa o la RAI.
El primer largometraje de animación made in Spain fue «Garbancito de La Mancha» en 1945, mientras que el primero en 3D de la industria española fue, El bosque animado en el años 2001. Aunque ha sido «Las aventuras de Tadeo Jones», el film que supuso un punto de inflexión para la animación española. Estrenada a finales de agosto de 2012, en su primer fin de semana recaudó 2,8 millones de euros compitiendo con grandes producciones estadounidenses como Madagascar o Ice Age y rompiendo récords de taquilla superando los 45 millones de euros de recaudación en todo el mundo y llegando a 50 países.
La secuela «Tadeo Jones 2: El secreto del Rey Midas», de 2017 mantuvo esta tendencia y obtuvo 3,2 millones de espectadores y casi 18 millones de euros en taquilla. Pero no han sido los únicos éxitos de la animación española. Películas como Mortadelo y Filemón, Ozzy, Atrapa la bandera, Futbolín o Planet 51 también fueron grandes éxitos de taquilla y público. Y la industria también ha generado producciones de temática menos familiar y más para adultos como «Chico & Rita», de Fernando Trueba que fue nominada por la Academia de Hollywood al Oscar a la mejor película de animación en 2012, «Arrugas» -primera película de animación en recibir el Goya a mejor guión adaptado- o «Un día más con vida».
Y ahora la pujanza del sector y su consolidación dentro de la industria cinematográfica española se ve reforzada por el hecho de que por primera vez una cinta de animación, «Buñuel en el laberinto de las tortugas» de Salvador Simó, compita con «Dolor y gloria», de Almodóvar y «Mientras dure la guerra» de Amenábar por representar a España en los Oscar en la categoría de mejor película de habla no inglesa.