Felipe González
«Tuvimos que entrar en la OTAN porque cuando llegamos al gobierno nos dimos cuenta de que los tanques españoles no miraban a las fronteras, sino que apuntaban a Madrid».
El enemigo estaba dentro y no fuera. Aquella observación nos la hizo Felipe González en el transcurso de un encuentro privado en su despacho en enero de 1999. Hasta entonces nunca lo había dicho en público y, sin duda, le hubiera resultado rentable. Pero González creía en el Estado.
Han pasado 25 años desde la victoria de Felipe González. Hoy, según una encuesta del Instituto Opina, el 75 por ciento de los españoles afirman que Felipe González fue un buen presidente.
El tiempo, poco a poco, pone las cosas en su sitio. Reconoce a González como el hombre que modernizó este oscuro país, que levantó una economía expoliada por la dictadura, y en crisis total, y supo empujar a la democracia a los poderes fácticos, que rapidamente buscaron el negocio de aquello.
Pero ese trabajo tuvo un enorme coste para él y su familia. González fue objeto de la persecución más encanallada que ha vivido este país. La cacería, realizada por demócratas de toda la vida, tenía por objeto castigar al hombre que les retiró los privilegios y forzar una vuelta al conservadurismo. Lo hicieron con menos éxito del que deseaban. Pero la historia es sabia y pone a todos en su sitio.
Actualización: hablan también de ello César, Rosa, José Carlos, y en «Al caer el sol» se puede escuchar el himno de la campaña: hay que cambiar.
y ahora miran a Barcelona
Gracias por el enlace Fernando! un honor aparecer en tu blog.