«La enorme cantidad de prisioneros de guerra en manos de fuerzas nacionales salvadoras de España permite efectuar estudios en masa»
Republicanas represaliadas en Oropesa (foto)
El auto de inhibición del Juez Baltasar Garzón entorna una puerta judicial pero extiende al caso a numerosos juzgados y da cuenta de algunos estudios que el franquismo hizo sobre los detenidos en los campos de concentración.
Para documentarlo, Garzón incluye algunos textos extraidos de informes de la época. Testimonios que, tal y como sucedió con su auto anterior, son muy ilustrativos:
Aun en la posguerra -señala Garzón-, Vallejo alertaba sobre el daño que podía hacer y hacía el ambiente democrático en niños y niñas, e insistía en combatir la propensión degenerativa de los muchachos criados en ambientes republicanos, debiendo ser segregados en centros adecuados, en los que se promoviese «una exaltación de las cualidades biopsíquicas raciales y eliminación de los factores ambientales que en el curso de las generaciones conducen a la degeneración del biotipo» .
Estas teorías tendrían aplicación práctica inmediata en la posguerra, específicamente sobre los hijos de las presas republicanas encarceladas por motivos políticos, aunque este carácter no se les reconociera, precisamente por la conceptuación que de las mismas daba el Gabinete de Investigaciones Psicológicas. En ??Psiquismo del Fanatismo marxista? de la Revista Semana Médica Española. 6 años. San Sebastián 08/10/1938, pg 172. Citada por Ricard Vinyes. :
??La enorme cantidad de prisioneros de guerra en manos de fuerzas nacionales salvadoras de España permite efectuar estudios en masa, en favorabilísimas circunstancias que quizás no vuelvan a darse en la historia del mundo. Con el estímulo y beneplácito del Excmo. Sr. Inspector de los Campos de Concentración, al que agradecemos toda suerte de cariñosas facilidades, iniciamos investigaciones seriadas de individuos marxistas, al objeto de hallar las relaciones que puedan existir entre las cualidades biopsíquicas del sujeto y el fanatismo político democrático-comunista?.
Doctor A. Vallejo Nágera (director del Gabinete de Investigaciones Psicológicas), en el trabajo Psiquismo del fanatismo marxista. «Investigaciones psicológicas en marxistas femeninos delincuentes«. Publicada en la revista Española de Medicina y Cirugía de Guerra, 9, año II, mayo de 1939, pg. 399,
??Recuérdese para comprender la activísima participación del sexo femenino en la revolución marxista, su característica labilidad psíquica, la debilidad del equilibrio mental, la menor resistencia a las influencias ambientales, la inseguridad del control sobre la personalidad? Cuando desaparecen los frenos que contiene socialmente a la mujer y se liberan las inhibiciones frenatrices de las impulsiones instintivas; entonces despiértase en el sexo femenino el instinto de crueldad y rebasa todas las posibilidades imaginadas precisamente por faltarle las inhibiciones inteligentes y lógicas? Caracteriza la crueldad femenina que no queda satisfecha con la ejecución del crimen, sino que aumenta durante su comisión. El hecho es tanto más digno de atención cuanto que la mujer suele desentenderse de la política, aunque su fanatismo o ideas religiosas la hayan impulsado en los últimos años a mezclarse activamente en ella, aparte de que en las revueltas políticas tengan ocasión de satisfacer sus apetencias sexuales latentes?.
Conocí las monstruosidades de Vallejo Nájera por un libro de Benjamin Prado, «Mala gente que camina», donde habla también del secuestro de niños a las madres republicanas para dárselos en «adopción» a los fascistas.
Está muy bien que esto se conozca. Hay mucha gente que prefiere mirar para otro lado, no saber.