George Lakoff: «los políticos deben invocar la moral de la gente»
George Lakoff ha servido de insipiración a los progresistas de todo el mundo. Sus escritos han sido utilizados tanto por los demócratas en EEUU como por los socialistas en España para profundizar en nuevas fórmulas de comunicación. Es uno de los mayores expertos en comunicación política. El autor del aclamado libro “No pienses en un elefante“, ha visitado Madrid de la mano de la “Fundación Ideas para el progreso“.
Sus teorías.
Según estudian los lingüistas cognitivos, -él lo es- nuestro cerebro reduce la vida a metáforas, desde la infancia, para hacerla «almacenable» y «comprensible».
Lakoff ha estudiado cientos de discursos de Bush y otras figuras Neoconservadoras y ha descubierto que los políticos conservadores de EEUU llevan tiempo introduciendo en sus textos todo tipo de metáforas sobre el bien y el mal y sobre la familia. Y Lakoff denuncia que no fueron elegidas al azar.
Gracias a diferentes disciplinas de investigación, detalladas en su libro ($) , explica que si alguien consigue despertar o evocar una de esas metáforas de nuestro cerebro con sus palabras (Bush es un «padre protector», por ejemplo), no habrá dato objetivo que consiga contradecirlo.
Razonamos en “marcos”, -explica George Lakoff: “La teoría dice que la razón se opone a la pasión: pues no. En 1996 se descubrió que tenemos unos sistemas que nos permiten conectarnos directamente con otras personas. Al mirar podemos notar si otras personas están tristes o están aburridos”.
“En EEUU, -explica Lakoff- los políticos conservadores estudian empresa, márketing y economía, mientras que los demócratas estudian ciencias políticas. Eso ha hecho que los conservadores enmarquen mejor sus mensajes, los dirijan mejor hacia los “intereses” de los electores” -opina.
Lakoff pone como ejemplo la batalla librada por Obama para lanzar su programa sanitario: Los demócratas presentaban una “lista de temas que serían buenos para la sociedad”, mientras que los Republicanos denunciaban que el programa demócrata era “inmoral”. Aludían a la inmoralidad. Es eso, en lo que -a su juicio- deberían profundizar los demócratas: dirigirse a la moralidad y a las emociones.
Lakoff advierte de los numerosos ciudadanos que tienen a la vez moral progresista y conservadora y aconseja a la Izquierda defender sus valores con emoción y encajarlos en una narrativa que genere empatía: “El volumen y el techo de la gente con doble moral, progresista y conservadora, es cada vez mayor y son los que determinan las elecciones”.
Dando por sentado este escenario, alerta sobre lo que está pasando en Estados Unidos, donde, según su criterio, el 80 por ciento de los periodistas, tertulianos y personas que intermedian con la población a través de los medios de comunicación (radio, televisión, Internet, etc.) lo hacen desde supuestos conservadores, de tal manera que la gente se acostumbra al esquema moral de la Derecha.
Lakoff defiende que el lenguaje genera y a la vez se acopla a marcos y sistemas de pensamiento que, cuando se repiten constantemente, crean formas de pensar que no son naturales, pero que la gente, en su subconsciente, empieza a asimilar como naturales.
Para combatir esto, Lakoff aconseja a la Socialdemocracia europea transmitir con emoción sus valores de siempre, encajarlos en un relato que permita conectar con la gente, hablar de los problemas reales de la calle, y amasar la credibilidad suficiente para que la ciudadanía confíe en que seas capaz de transformar esos valores en políticas.
En todas esas teorías profundiza en sus textos y en sus clases. En la actualidad Lakoff imparte Lingüística en la Universidad de Berkeley. Fue fundador de la llamada Semántica Lingüística y de la Semántica Cognitiva, y su aplicación a las realidades sociales y las contigencias políticas.
En el coloquio, presentado por Jesús Caldera y moderado por Carlos Mulas Granados (Fundación Ideas), Lakoff estuvo acompañado por Stanley Greenberg, asesor electoral del Partido Demócrata que formó parte del equipo con el que Obama ganó las elecciones presidenciales en EE UU.
Stanley Greenberg indicó que, en el contexto de la crisis económica internacional, Europa giró a la derecha porque la Izquierda es incapaz de generar confianza, pues, en su opinión, no tiene soluciones a esta nueva situación y se ha dejado ocupar su discurso y espacio tradicionales por las fuerzas conservadores.
Para Greenberg, la Socialdemocracia solo puede voltear esta situación si, a partir de unos valores y sentimientos, encuentra líderes que sepan articular una narrativa de acuerdo al momento que viven los ciudadanos. Para ello, explicó, hay que tener proyecto político, pues el lenguaje no es nada si está divorciado de programa ideológico.
En este sentido, explicó que, a diferencia de los partidos políticos de izquierda en Europa, cuyo voto, aventuró, se diseminará si no arman un discurso político sólido, en EEUU el actual Presidente, Barack Obama, supo incluir en su narrativa asuntos como la inmigración, el aborto, el muticulturalismo, la defensa de las pensiones, o el germen de una sanidad pública, que conectaron con la calle. En su opinión, la clave del éxito de Obama estuvo en tener un discurso que en tiempos de crisis, no hablaba en términos económicos, sino de protección para los ciudadanos y de otorgar más poder al pueblo.
“Hay que entender el momento y los líderes deben entender el momento y apuntar a una narrativa concreta del futuro, entendiendo a la gente, y sus incertidumbres”. (Stanley Greenberg)
Llevo bastante tiempo planteando lo mismo pero, claro, como soy «escribidor de versos» apenas nadie ni lo entiende ni hace mucho caso.
Interesante lo que plantea.
Sólo un pequeña crítica: ¿nos «salvará» la socialdemocracia de este presente y futuro hundimiento?.
El discurso de la socialdemocracias, aunque menos moralista, en teoría, que el de los conservadores, en el fondo, ¿no están reproducendo casi la misma moral conservadora que critican?.