La imagen de militares españoles recibiendo un bendición arrodillados en la escalera y bajo la cruz del Valle de los Caídos ha generado un gran revuelo. El capitán que llevó a la unidad del Ejército hasta allí ha sido suspendido y la noticia ha llegado incluso a medios internacionales como Le Figaro o Sudouest. Emilio Silva, presidente de la ARMH comenta el hecho en el programa La Cafetera de Radiocable.com y apunta que «lo sucedido es un síntoma y hay que ir a la raíz» porque señala que existe una cultura política dentro del Ejército que ve normal las acciones del capitán.

NOTICIA ACTUALIZADA: El Washington Post se hace eco del incidente y destaca «España cesa al capitán cuyos soldados se arrodillaron ante el memorial de Franco».

Una compañía del Batallón de Infantería Protegida (BIP) ‘Uad Ras’ II / 31 ha acudido por orden de su capitán al mausoleo del Valle de los Caídos para que el abad benedictino bendijera su banderín. El video y fotografías de los hechos se volvieron virales y han generado una gran controversia por desarrollarse en el lugar en el que hasta 2019 estuvo enterrado el dictador Francisco Franco y donde aún se encuentra, José Antonio Primo de Rivera, fundador de Falange.

El Ejercito ha reaccionado asegurando que se trato de una actividad no autorizada y suspendiendo al militar responsable. Y la noticia ha llegado incluso a las páginas de medios como los diarios franceses Le Figaro o Sudouest que detallan como el video «calificado de la vergüenza por el colectivo que lo ha difundido» muestra a varias decenas de soldados de uniforme arrodillados ante el antiguo mausoleo de Franco con la bandera de su unidad y un religioso bendiciéndoles.

ACTUALIZACIÓN: El Washington Post también se hace eco del incidente, destacando: «España cesa al capitán cuyos soldados se arrodillaron ante el memorial de Franco». Explica que el Ministerio de Defensa ha destituido al militar después de conocerse un video, colgado por grupo pro-democracia del propio Ejército, en el que 30 soldados de su unidad se arrodillaban delante del Valle de los Caídos «el símbolo más potente de la dictadura del General Francisco Franco».

Emilio Silva, presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica ha comentado los hechos en La Cafetera, recordando  que desde octubre de 2020, los monjes benedictinos están de manera ilegal en el Valle de los Caídos y se ha permitido que lo use «como un chiringuito religioso ortodoxo católico y con vínculos con la derecha radical.». Añade que han existido antecedentes de conductas como la del capitán: «yo he visto el 30 de marzo de 2019, la víspera del 1 de abril, día de la victoria en la Guerra Civil a ex golpistas celebrándola en el comedor de los monjes en la hospedería. Incluso había un teniente de la Guardia Civil vestido con el uniforme de gala,. Esto es un hábito y la hospedería del Valle es  un polo de la extrema derecha que tiene un territorio conquistado.

Enfatiza que además el capitán que hizo esta marcha, se arrodilló y recitó unos versos de un poema de José María Pemán, que «es el gran depurador del magisterio en España, «el Torquemada» de los maestros y maestras de la República», llamado Resignación que es casi un alegato a lo que hicieron los golpistas en la guerra del 36. Y denuncia «ver eso es muy bestia.» Denuncia que el Valle de los Caídos sigue siendo un lugar de referencia para los que apoyan la dictadura y apunta «y eso es muy fácil cambiarlo. Bastaría con que pusieran diez paneles junto a la Basílica explicando lo que es, para darle el significado que tiene que tener un sitio así en democracia».

Sobre la suspensión del capitán que ha protagonizado estos hechos, el presidente de la ARMH avisa: «El problema no es que le tiren de las orejas dos días, sino que habrá mucha gente dentro del Ejército que le va a dar una palmada en la espalda cuando lo vea». Denuncia que el Ministerio de Defensa cada vez que han salido vínculos del Ejército con la extrema derecha, los ha negado, pero «están ahí formando parte de las Fuerza Armadas, consintiéndolo, como si fuera natural que el Ejército tenga esa cultura y tendencia política».

Aboga porque haya una comisión en el Parlamento que estudie cómo se forman los militares: «Si realmente no estamos educando y contratando a militares cuyo principal principio es la defensa de la democracia y la diversidad, tenemos un problema. Este arrodillamiento en el Valle de los Caídos da una imagen del medievo y en estas cosas, España no ha conseguido encontrar la puerta de salida del siglo XIX».

Pese a todo, Silva, celebra que haya habido una sanción para el capitán «en otras ocasiones similares no ha ocurrido nada» apunta. Pero añade: «lo que no me sirve es la frase de que llevó sin permiso allí a la unidad. ¿Que pasa que con permiso hubiera estado bien ir? El problema no es que haya desobedecido. El problema es que haya un capitán en el Ejército que piense que puede ir con una unidad a arrodillarse en ese sitio. Esta cultura política es el problema que hay que afrontar. La sanción está bien, pero lo sucedido es un síntoma y hay que ir a la raíz». (Audio min 47:00)

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