Internet Opina: «El asunto Alakrana requiere una manera nueva de enfocar las cosas que al estado le resulta especialmente difícil»
El secuestro del Alakrana está protagonizando las portadas de los periódicos desde hace muchos días. La difícil situación en la que se encuentra el Gobierno o las inoportunas críticas del Partido Popular están siendo comentadas también en internet.
Javier Casal reflexiona sobre el tema. «En plena negociación con los secuestradores, con la vida de los marineros en el aire y cuando todo el mundo espera de un partido responsable que arrime el hombro en un asunto de Estado, dice la portavoz parlamentaria del PP: «El Gobierno no ha tenido una estrategia de cómo reaccionar ante esta situación. El Gobierno no ha valorado los pros y los contras de cada decisión que tomaba y ha estado superado por las circunstancias». ¿Ha recibido ya Génova un telegrama de felicitación desde Somalia? Estará al caer».
El blogger Daniel Tercero también hablo de ello… «Las cartas están sobre la mesa. De ser familia de los marineros, ahora en aguas somalíes, también pediría que el Estado español se igualara al somalí. Es decir, que no existiera. Pero los familiares de los marineros son eso, familiares. No hay razón de Estado que quepa fuera del Estado de la ley, ni familias que legislen (ni juzguen), y es ahí donde el Gobierno tiene un papelón de los de aúpa. ?l solo se ha metido; siendo culpables, no perdamos el horizonte, única y exclusivamente los piratas (¿podemos hablar ya de terroristas?)», dice.
Iñaki Anasagasti pide que sus lectores del blog se pongan «el símbolo del apoyo de la Red a los marineros del ALAKRANA y sus familias: El pañuelo de arrantzal. Ponedlo en vuestros perfiles en Facebook!. Pongámonoslo al cuello para ir a trabajar, para ir a la uni, para salir de potes…! En los coches, en las ventanas».
Asimismo, en el blog Ventanas del Falcón opinan que «el Gobierno está haciendo muy bien en negociar con los secuestradores, tal y como ahora le pide el PP. Lo curioso es que el PP se decante ahora por la negociación en este conflicto con los piratas y no lo hiciera con ETA en el conflicto político vasco en la legislatura pasada. En lo que no cambia el PP es en utilizar a los familiares de las víctimas para sacar rédito político. Pero, como de costumbre, los del PP no dicen cómo actuarían ante el problema. Están jugando con el sufrimiento de las familias. Es la única oposición del mundo a la que se le ocurre hacer oposición con un tema como éste».
Lluis Bassets se fija en «los armadores que mandan sus barcos de pesca a zonas de alto riesgo, a sabiendas de que pueden caer en manos de los secuestradores somalíes. Los pesqueros que faenan en la zona protegida militarmente por el dispositivo de seguridad internacional, y concretamenre por la operación europea Atalanta, apenas están sufriendo ni siquiera el acoso de los piratas». Y añade: «el secuestro del Alakrana, en todo caso, en un buen revelador del estado de las instituciones en un país como España. Aquí, unos y otros invierten la sentencia hipocrática: ante todo, buscar el propio beneficio aun a costa de producir el máximo daño.»
Incluso David de Ugarte ha escrito sobre el caso. «El asunto Alakrana requiere una manera nueva de enfocar las cosas que al estado le resulta especialmente difícil. El mismo planteamiento es extraño: ¿Qué hace el estado español negociando el destino de la tripulación de un barco de Seychelles cuyo armador, aunque tenga su sede central en Bermeo, actúa como si fuera una empresa del archipiélago? ¿Qué hace juzgando a piratas somalíes en función de un derecho de justicia extraterritorial autoarrogado que estorba, luego del show mediático, a la negociación del rescate?»