Israel y Palestina
Iñaki Gabilondo en Noticias Cuatro: «Hoy hace cinco años, moría Yaser Arafat. Y desde hace casi cuatro años sigue en estado vegetativo Ariel Sharon en un hospital de Tel Aviv. Y desde hace tres años sigue secuestrado por Hamas el soldado israelí Gilad Shalit.
Y Gaza sigue abandonada a su amarga suerte y Mahmud Abbas se retira, con las esperanzas agotadas. E israel sigue construyendo asentamientos en Cisjordania.
Y los palestinos siguen divididos, unos días enfrentados a tiros y otros días enfrentados sin tiros, entre partidarios de Hamas y partidarios de al Fatah. Y las conversaciones de paz están, según como se mire, o muertas como Arafat o en estado vegetativo como Ariel Sharon. Y los argumentos de todas las fuerzas en conflicto están fosilizados, en el mismo punto en quedaron muchos años atrás.
Y las treguas no duran nada. Y son solo pausas debidas a la fatiga, de las que se sale por donde se entró. Y los moderados de todo signo son siempre barridos por los extremismos de todo signo.
Te golpeo porque me golpeas, si no me golpearas no te golpearía. El círculo infernal de siempre. Y detrás, o en el fondo, para hacerlo todo mas difícil, lo sagrado. Jerusalén, innegociable, repartible solo en la teoría.
La tierra llamada santa por cuyo suelo se llevan matando los hombres desde hace dos mil años. De pronto, alguien aparece cargado de buena voluntad, decidido a reconducir las cosas. Como ahora Obama.
Pero enseguida parece tragado por las arenas del Neguev o las aguas del Jordán. Y los instrumentos de la democracia resultan inservibles. Las resoluciones de Naciones Unidas son humo. Israel lleva incumplidas veintiséis, desde 1947.
Y la gran herramienta democrática, las elecciones libres, ya no podrán volver a emplearse después de que los países democráticos se burlaran del resultado de las elecciones democráticas de enero de dos mil seis porque habían ganado democráticamente los que no debían.
Callejón sin salida, aguas estancadas y hastío universal. Lo comentamos porque sabemos que este asunto ya no le importa a nadie y creemos que debemos intentar que importe.»