Hoy en La Cafetera José Manuel Sande, el concejal juzgado por un cartel de carnaval sobre el Papa
José Manuel Sande (@JMSande ), concejal de Cultura del ayuntamiento de Coruña, declara hoy ante un juez, acusado de un delito contra los sentimientos religiosos, por utilizar en entre los anuncios del carnaval un cartel en el que aparecía la imagen de alguien disfrazado de Papa, subido a un papamóvil, con la nariz roja por haber bebido. Se trata de una caricatura que podría aparecer dentro de una viñeta de cualquier medio de comunicación, pero la denuncia de un colectivo de viudas de Lugo ha sido admitida a trámite por un juez y Sande declara hoy a las 12:30 en calidad de investigado, la nueva denominación que se utiliza para lo que anteriormente se llamaba imputado.
En declaraciones a La Cafetera de radiocable.es ha explicado que: El delito por el que me denuncian está tipificado como ofensa a los sentimientos religiosos por un cartel en el que sale una figura disfrazada de papa, dentro de una serie en la que aparecen personas con otras disfrazas de personajes de la historia o conocidos”.
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La denuncia admitida a trámite contra el concejal coruñés llega después de casos emblemáticos: los titiriteros, el concejal madrileño Guillermo Zapata, el cantante César Stawberry o la tuitera Cassandra Vera. Algunos juristas dudan de que el código penal regule sentimientos. “Nosotros desde el inicio del mandato hemos sido fieles a las leyes que dictan que las instituciones no tienen ninguna confesión religiosa y respetamos las sensibilidades de gente que sí la tiene”, explica Sande.
El actual gobierno municipal de Coruña fue duramente criticado por grupos y medios conservadores cuando su alcalde, Xulio Ferreiro, no acudió a los actos del corpus, asumiendo que el programa electoral con el que fue elegido alcalde anunciaba el comportamiento laico de los representantes municipales.
José Manuel Sande rechaza públicamente cualquier posibilidad de disculparse: “Nosotros hemos sido respetuosos y no creemos que tengamos que pedir disculpas por ejercer una libertad muy básica y muy importante. Si esto es una guerra cultural tendremos que afrontarla. Si me llegara un cartel similar el año que viene no temblaría. Nosotros hacemos una apuesta por la ciencia y el conocimiento y siempre obramos desde el respeto aunque sin atacar creencias”. Y añade: “Ante este tipo de denuncias debemos ser firmes y respaldar a los artistas. Las redes sociales se han convertido en una mina para determinados grupos ultras”.