El periódico francés Le Figaro publica un texto titulado: �??España quiere proteger sus 10.000 kilómetros de costa�?�. En el artículo se destaca que el Gobierno ha recuperado una ley de protección del litoral de 1988 que está provoca la ira de los propietarios pues pretende recuperar todos los terrenos urbanizados a menos de 100 metros de la zona arenosa de la costa. «El poder público ofrece a los propietarios cuyas casas están más allá de la línea de protección del litoral una compensación simbólica»…

�??En virtud de una ley de costas que data de 1988 y que hasta ahora permanecía en el olvido del ministerio de Medio Ambiente, el ejecutivo socialista desea redefinir el conjunto de las zonas costeras del dominio público. Pero, si el Gobierno desea evitar nuevas masacres de hormigón a lo largo de sus 10.000 kilómetros de costa, también desea limpiar las construcciones anárquicas ya existentes. Para conseguirlo, el Estado pretende recuperar todos los terrenos urbanizados en la zona protegida. Esto es; todos los edificios construidos a menos de 100 metros de la zona arenosa (dunas) o rocosa (acantilados)�?�.

�??Para los propietarios, la iniciativa del Gobierno supone un auténtico mazazo. El poder público ofrece a los propietarios cuyas casas están más allá de la línea de protección del litoral una compensación simbólica. El Estado propone comprar sus bienes al precio de la época en la que fueron comprados. Una propuesta que la mayoría de los propietarios considera escandalosa, teniendo en cuenta que los precios de la vivienda han aumentado un 150% en diez años. Por su parte, los residentes afectados han tomado la delantera para no tener que ver como �??expolian�?� sus bienes. El colectivo ha presentado una denuncia ante el Parlamento Europeo por atentado contra la propiedad privada y denunciando el efecto retroactivo de la ley. Por el momento, su solicitud no es más que papel mojado�?�.