Manual para el político de izquierdas: ¿a quién quiere parecerse? ¿a Lula o a Sarkozy?
¿Qué es la red? La red es ese lugar que despierta fascinación por los millones de contenidos que alberga. Esto es gracias a que miles de personas de todo el mundo copian, pegan, mezclan, rehacen, traducen, reproducen, difunden.
Algunos lo han hecho voluntariamente -utilizando su tiempo- y otros han creado pequeños negocios basados en la disparidad legislativa y la creatividad de las multitudes.
Eso ha generado un maremoto cultural, único en la historia de la humanidad. Seamos serios: es indiscutible que la red como la conocemos ha traído más cosas buenas que malas. La mayor parte de estos materiales a los que accede la gente no son originales: han sido copiados, transformados y redifundidos. Esto es difícil de ver en una canción o una película, pero es un hecho indiscutible en el texto de libros, artículos, imágenes, diseños etc..
A ellos accede gente de toda condición: alguien de recursos limitados puede hacerlo desde un cibercafé, y leerá el mismo contenido, accederá a la misma información, que el más rico de los millonarios.
El hecho de que millones de personas por el planeta hayan estado participando de este proceso durante años hace que Internet esté compuesto por miles de millones de documentos interesentes: presentados desde múltiples puntos de vista. Esto demuestra que las leyes que teníamos no eran tan malas.
Claro, lo que tiene de bueno, lo tiene de nuevo: Está obligando a un sector entero a reestructurarse. Pero pensar que eso ha arruinado a ese sector es falso, es simplemente mentir: una de las operadoras móviles de nuestro país vende cerca de 300.000 canciones mensuales a través de sus teléfonos …. ¡una sola de las operadoras! Lo comido por lo servido: un sector cambia mientras nace otro. Eso mismo pasa en el cine, en la música -con modelos culturales como spotify- y pasará con los libros, revistas y periódicos.
Es tan simple como esto: Si hubieran existido esas leyes que están tratando de aprobar, la red, como la conocemos, no existiría.
Es la diferencia entre utilizar materiales de la Fnac o de una biblioteca pública.
*Recuerde lo que es la izquierda. Recuerde que defiende una ideología que quiere universalizar la cultura, más allá de los recursos que tenga cada uno para acceder a ella.
*Borre de su cabeza todo lo aprendido hasta ahora. Muchas de las cosas son mitos y otras se deben reinventar. Las normas se las está dictando una industria, no sus ciudadanos.
*Paralicen la Disposición Final primera. Además de sostener ese modelo está contribuyendo a crear una gran inseguridad jurídica.
*Abran un debate en el seno de la izquierda, con una mirada realmente progresista sobre el modelo cultural que queremos para nuestro país.
¿A quién quiere parecerse? ¿a Lula o a Sarkozy? ¿Quieren equiparar la Propiedad Intelectual a las patentes del medicamento?
Si seguimos así, se van a liquidar Internet tal y como lo conocemos. En definitiva: escuchen a los ciudadanos, no a los poderosos: no es tan difícil.