Prensa portuguesa: «Desigualdades sociales son el reverso de la medalla de la descentralización española»
El diario Publico publica una crónica de Nuno Ribeiro en la que profundiza en el diseño autonómico español y denuncia que su reverso: las importantes diferencias que existen entre los ciudadanos en función de donde residen debido a la transferencia de competencias. Y destaca también el nulo interes de los partidos mayoritarios por armonizar las diferencias.
(Foto: Flickr/Josem.rus)
El texto asegura que «En fiscalidad, políticas de sanidad y educación, existen claras diferencias entre los ciudadanos según la comunidad en la que residen. Es el otro lado de un sistema que permitió el desarrollo regional, luchó contra asimetrías históricas pero acabó por consagrar nuevas diferencias y suscitar observaciones? En la práctica, en España no hay una unidad de política tributaria, con valores diferentes en las comunidades con respecto a las deducciones del IRPF e impuestos de sucesiones y donaciones».
«La unidad del mercado es también perjudicada por la disparidad de incentivos fiscales y normas reguladoras a la instalación de empresas. Con esta base de desigualdad y sin armonización fiscal, lógicamente se desarrollan otras diferencias en sectores clave para la igualdad de los ciudadanos», dice Público.
Y explican «En la salud y en la educación, cuya transferencia de competencias fue concluida por los gobiernos de J.M. Aznar, las disparidades son evidentes. Y el artículo sigue: «En España no hay un libro de vacunas, sino 17, uno por cada comunidad autónoma, originando conflictos administrativos y frenando la movilidad geográfica? Diferentes son los apoyos sociales? También son distintas las normas y programas de educación, conforme los intereses y las capacidades financieras de cada región».
«Sin embargo, la armonización de las diferencias no consta entre las preocupaciones de los estados mayores de los partidos, con excepción de Unión Progreso y Democracia, de Rosa Diez, que predica sola en el desierto, y reclama que la educación regrese a la competencia del Estado», asegura el diario.