Una España “neofranquista” e “hipócrita” que desvía la atención: así ve la crisis de Ceuta la prensa marroquí
La auténtica causa de la crisis migratoria y diplomática entre Madrid y Rabat y de la llegada de miles de inmigrantes a Ceuta es la acogida en un hospital español del líder del polisario, Brahim Ghali y España está actuando como un estado «neofranquista» y «racista» que está «desviando la atención de la opinión pública» con ataques a Marruecos. Este es el relato que están haciendo los medios marroquíes de la situación tras la avalancha de migrantes en el enclave español que agudizado la crisis bilateral entre Rabat y Madrid.
En los primeros días de las llegadas masivas a Ceuta, la prensa del reino alauí, especialmente la oficial, apenas prestó atención a la crisis y los que lo hicieron, pusieron sobre todo el foco en el trato dispensado en España a los inmigrantes. Por ejemplo, uno de los que se hizo eco de la situación fue el diario Asabah que tituló: «Bombas y tanques (españoles) para impedir la entrada de miles a Ceuta» mientras otros hablaban de «brutalidad» de la policía y soldados españoles. Pero con el paso del tiempo y tras ser noticia en los medios de todo el planeta que pusieron de relieve la crisis humanitaria y diplomática, las reacciones en Marruecos se fueron exacerbando. Estas son algunas de las más significativas.
| Le déferlement de migrants vers le préside occupé de #Sebta a réveillé les préjugés coloniaux et racistes des autorités espagnoles, qui les ont accueillis avec une violence inouïe.https://t.co/aY1lncPFqj
— Le360 (@Le360fr) May 19, 2021
MAP considera que una «traición» de España ha agravado la crisis con Marruecos y que la posición del gobierno de Sánchez es «esquizofrénica» y se camufla con la ultraderecha. La agencia oficial de noticias tardó varios días en informar de la masiva llegada de inmigrantes a Ceuta y lo hizo inicialmente en una tribuna de su director, Khalil Hachimi Idrissi, en la que acusaba al gobierno de Pedro Sánchez de «esquizofrenia» por hablar de integridad territorial de España en Ceuta y no la de Marruecos en el Sáhara Occidental. También señala como «ridículo» que las autoridades españolas no se hagan responsables de la actual crisis cuyo origen tiene que ver con Brahim Ghali. Y advierte de que la «alegría» de los partidos de ultraderecha en España es señal de que «Pedro Sánchez va directo contra un muro».
Posteriormente MAP publicó un decálogo en donde señala algunas de las razones de la crisis abierta entre Marruecos y España, siendo la primera la acogida de Brahim Ghali en un hospital español. Menciona también que no se informara de ello a Rabat así como la postura española sobre el Sahara Occidental. Y asegura «los responsables ibéricos han elegido agravar la crisis, encadenando meteduras de pata, cuando menos inamistosas, falsos pretextos y ambigüedades».
Le 360 apunta sobre la crisis «Sánchez se pone la máscara de Franco» y señala que Marruecos «espera actos de España» sobre Ghali, la causa de la crisis. El digital, próximo a la casa real alauí, sostiene que la avalancha de migrantes hacia Ceuta -ciudad que define como «presidio ocupado»- ha despertado «los prejuicios coloniales y racistas de las autoridades españolas». Considera que España ha acogido a los llegados con un «violencia inaudita» mostrando que es un «estado neo-franquista para quien los derechos humanos son de geometría variable». Además cita a un alto responsable de la diplomacia marroquí que asegura que la crisis bilateral entre Marruecos y España no está relacionada con el flujo migratorio, sino con la admisión a escondidas en suelo español de un «criminal de guerra que ha llamado a coger las armas contra Marruecos». Sostiene que la crisis entre ambos países «se llama Brahim Ghali y no Ceuta», enfatizando en este sentido, que Marruecos espera «actos» de España.
Al Ahdath Al Maghribia señala que la avalancha de inmigrantes en Ceuta y la acogida de Ghali evidencian que España sigue teniendo complejo colonial y denuncia la violencia policial. El rotativo asegura que Marruecos está comprobando que el «complejo colonial sigue sólidamente implantado en los políticos españoles» que decidieron acoger a un «separatista hostil» introducido con una falsa identidad y la complicidad de Argelia. Considera que se trata de un acto «inadmisible bajo todas las reglas diplomáticas y de buena vecindad». Pero señala que la crisis ha empeorado cuando la policía fronteriza española ha «fracasado en su misión» de proteger su enclave de la avalancha de migrantes «como si Marruecos fuera el gendarme encargado de asegurar esa misión». Y añade que la llegada de miles de migrantes a Ceuta ha «despertado los prejuicios coloniales y racistas de las autoridades españolas que los han acogido con «porras, gases lacrimógenos y bolas de goma».
Le Matin asegura que su ministro de Exteriores ha asestado a España algunas «verdades bien sentidas» como que Madrid «intenta desviar la atención del verdadero origen de la crisis». El rotativo oficialista se hace eco de la comparecencia de Nasser Bourita, responsable de exteriores, que ha respondido a lo que se considera «ataques» por parte de España. Explica que el ministro asegura que «el juego de España» intenta desviar la atención de la opinión pública sobre el verdadero origen de la crisis que se remonta al 17 de abril -en referencia a la fecha en la que se admite al líder del Frente Polisario en España-«. Aunque no menciona apenas la llegada de miles de inmigrantes a Ceuta, se resalta que Bourita también rechaza las acusaciones de «chantaje» y «agresión» lanzadas desde España y acusa a Madrid de «hacer pagar a Europa el precio de su torpeza y debe explicar porque admite a alguien con una identidad falsa».
Le Desk recoge que Marruecos enfatiza que no acepta el doble lenguaje y las posiciones de Madrid. El digital marroquí se hace eco de la primer reacción de su ministro de Exteriores, Nasser Bourita, tras desencadenarse una crisis migratoria en Ceuta por la llegada de 8.000 inmigrantes en un contexto de pasividad de las autoridades en la frontera marroquí. Recuerda que desde España se ha acusado a Marruecos de intentar chantajear a España. Y enfatiza que el ministro ha respondido que no aceptan «el doble lenguaje y la posición de Madrid, añadiendo que «algunos en España deben actualizar su mirada hacia Marruecos.
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