Aunque la intención del presidente catalán era aumentar la visibilidad en el exterior del conflicto en Cataluña, su desplazamiento a Bruselas y el anuncio de que no piensa regresar a España han desconcertado a los medios globales. Muchos usan términos no demasiado favorables para explicarlo a sus respectivas audiencias. «Circo» es uno de los más repetidos, aunque también hay algunos que hablan de «acto de cobardía». Y la mayoría resalta que aunque no pida asilo, tiene pensado permanecer en Bélgica.

Der Spiegel titula «Carles, go home» y dice que el viaje a Bélgica parece un «acto de cobardía». La crónica que firma Claus Hecking considera que la escapada de Carles Puigdemont a Bruselas perjudica al movimiento independentista y ayuda a sus adversarios en Madrid. Considera incluso que enfrentarse a un juicio «serviría más a su casa» que su huida de Cataluña que «parece un acto de cobardía: Primero moviliza a cientos de miles de personas y luego las abandona”.

The Politico afirma: «el circo de Puigdemont llega a Bruselas». La noticia que firma Ryan Heath señala que el caos y la confusión dominaron tanto el viaje a Bélgica como la comparecencia del presidente catalán. Se hace eco de los momentos ridículos y destaca su afrimación de que no pediría asilo político, ironizando con que «quizá el caos le asustó». Termina la crónica haciéndose eco de loas gritos de «cobarde» que le dedicaron manifestantes a favor de la unidad de España.

Financial Times resalta que Puigdemont dice en una «caótica rueda de prensa» que seguirá su lucha desde Bélgica. El artículo de Michael Stothard recoe que el presidente catalán ha explicado que no viajçó a Belgica para pedir asilo político y que se sigue considerando el legítimo presidente catalán, a pesar de haber sido destituido por el gobierno español. Y apunta que en una caótica rueda de prensa» señaló que no volverá a España hasta tener «garantías» sobre su juicio.

The Telegraph destaca las críticas de otros políticos catalanes a Puigdemont. La crónica de James Badcock se hace eco de la reacción de Joan Josep Nuet, de Cataluña Si Que es Pot, que ha criticado el viaje del presidente catalán a Belgica porque «puede llevar a que los que se han quedado y declaren, sean enviados a prisión preventiva.»

De Morgen constata que el circo de Puigdemont va a permanecer en Bélgica. Su información enfatiza que la negativa del presidente catalán a presentarse ante el tribunal español va a mantener la presión sobre el gobierno belga y dificultará los esfuerzos del primer ministro Charles Michel por limitar el conflicto diplomático con España. De hecho menciona que aunque el anuncio de Puigdemont de que su viaje a Bruselas no era para pedir asilo, sino para poner el tema de Cataluña en la agenda europea, ha supuesto un «alivio» para el Ejecutivo belga, Michel ha llamado a Rajoy para intentar controlar el daño en la relación bilateral. Y advierte de que es posible que se emita una euroorden de extradición contra Puigdemont ante la cual no está claro como reaccionará el gobierno belga.

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