Die Welt: «los socios europeos de España, están hartos de los jueguecitos tácticos de Rajoy»
La periodista Ute Müller publica un texto en el diario alemán Die Welt titulado: «Un político no, un diseñador». Según la autora, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha sacado miles de millones de Bruselas, «pero las reformas en su país de origen se estancan. Un ejemplo peligroso».
La reputación del presidente del Gobierno español se ha resentido fuertemente en los últimos tiempos, pero Mariano Rajoy ha salido de la reunión de crisis de la zona euro como uno de los ganadores. También el duelo personal con la canciller alemana del ahorro, Angela Merkel, lo han ganado tanto él como el primer ministro italiano Mario Monti. (…) Pero los problemas estructurales de España no han quedado superados de este modo. Al contrario: la presión de reformar remite. Lo más peligroso es el componente psicológico del pacto.
(…) los socios europeos de España, entretanto están hartos de los jueguecitos tácticos de Rajoy. El 11 de abril, el presidente aún negaba que los bancos españoles necesitaran ayudas financieras de los socios europeos ?? y dos meses más tarde los institutos de crédito problemáticas tuvieron que recurrir al fondo de rescate de la UE.
(…) Rajoy debería condensar la sobredimensionada Administración. En los últimos años, en España ha surgido una doble y triple administración. Además del gobierno central y de los regionales, España se ha permitido el lujo de delegaciones municipales y de gobierno. Un país como España no puede permitirse esto a largo plazo.
Y, finalmente, Rajoy debería elegir también mejor a sus asesores. Uno de ellos, el experto económico, Rafael Pampillón, de la Business School IE, intentó encontrar a posteriori una justificación para la burbuja crediticia e inmobiliaria de la última década e identificó al BCE como co-responsable por su laxa política monetaria. También ha sido peligroso el intento de los últimos días de responsabilizar al gobierno alemán de las tensiones en los mercados de empréstitos. Ya solo queda la esperanza de que Rajoy por fin tome en serio la promesa que hizo a principios de semana: ??Reformaré todo lo que haya que reformar y corregiré todo lo que haya que corregir.