Se investigan en España ahora más de 30 casos de niños robados en el franquismo
Garzón fue quien, en 2008, puso el foco sobre unas denuncias que hasta entonces habían pasado casi desapercibidas. Su auto instaba a investigar el paradero de menores sustraídos a familias republicanas y dados en adopciones ilegales. Calculaba que los afectados podían ser más de 30.000. Ahora una oleada de denuncias está motivando que fiscales de diversos puntos de España hayan iniciado investigaciones sobre unos 30 casos de supuestos robos de bebés cometido hace 40 años.
La Fiscalía de Cádiz, la de Algeciras, la de Málaga o la de Valencia anteriormente son algunas de las que han abierto diligencias tras recibir denuncias de afectados que piden que se investigue el destino de hijos o hermanos a los que los hospitales donde nacieron dieron por muertos. Todos los casos apuntan a actitudes sospechosas o extrañas del personal sanitario, que no pudieron ver los cadáveres o nunca les dijeron dónde los enterraron.
Las primeras denuncias fueron conocidas en el Campo de Gibraltar, donde su fiscal, Juan Cisneros, ha sido muy activo a la hora de impulsar la investigación. Fue el primero en trasladarlo a la Policía como continuación de las diligencias abiertas de oficio tras conocer las denuncias públicas de las familias. A él le han llegado 13 denuncias, fundamentalmente de casos ocurridos en La Línea en los años sesenta y setenta.
Cisneros fue el primero en plantear que estos delitos, a pesar de las décadas transcurridas, podrían no haber prescrito. Si se considera que fue una acción para tapar una negligencia médica, habría prescrito, pero si la intención fue la de cambiar a un niño de familia, no lo estaría. En cualquier caso la investigación es muy ya que hay centros denunciados que ya no existen y han muerto muchos de los implicados.
Hay además una Asociación Nacional de Afectados por Adopciones Irregulares (ANADIR) que tiene unos 230 miembros y que asegura que reciben muchas otras denuncias sobre posibes robos de bebés. El abogado Enrique Vila, especialista en ayudar a que algunos hijos adoptados encuentren a sus padres biológicos, tiene previsto presentar el próximo 27 de enero una denuncia sobre los niños robados ante la Fiscalía General del Estado.