Corresponsal del Wall Street Journal: «Ana Patricia Botín se verá enfrentada a la presión de los resultados»
Con la sucesión en el Banco Santander, España vive un «cambio de guardia» generacional en sus máximos responsables, también entre los líderes políticos, con la excepción de Rajoy, señala David Roman. El corresponsal de la Agencia Dow Jones/Wall Street Journal analiza el impacto de la desaparición del presidente del Santander y los retos que afronta su sucesora Ana Patricia Botín.
Sobre el reto al que se enfrenta su sucesora, Ana Patricia Botín, David Roman señala: «El mayor reto es que el sector bancario es completamente diferente al de la época dorada de Botín. El gobierno y todo el sector empresarial querían un crecimiento del sector bancario, que estaba muy fragmentado con muchos bancos regionales pequeños y había el temor de que fueran arrollados en cuanto se abriera a la competición extranjera. Así que se crearon bancos muy grandes, que fueron creciendo y que se han convertido en gigantes. Pero eso no lo puede mantener Ana Patricia Botín porque un banco que ya es demasiado grande para ser salvado, no puede ser cinco veces demasiado grande para ser salvado. Nadie espera que siga creciendo así».
Y añade además que Ana Patricia Botín se verá enfrentada a la presión de los resultados: «Ha sido elegida porque es la hija de Emilio Botín, y porque la gente considera que ha hecho un trabajo razonable. Ha sido muy preparada para el banco. Muchos creen que lo conoce mejor que otros candidatos, pero todo dependerá de los resultados. Si no da resultados, los accionistas no la mantendrán. Pero su nombramiento ha sido bien recibido porque no hay nadie más preparado que ella para dirigir el Santander. Lleva toda la vida ahí. Si trajeran a cualquer otro candidato, aunque hubiera pertenecido a la Entidad los últimos 20 años, sería mucho menos de lo que ella ha estado.»
Sobre la influencia que tuvo Emilio Botín para la economía española, David Roman afirma no estar convencido de que esta «fuese positiva para la política o la economía», y apunta que se trataba mas bien de «una influencia positiva para su banco, al que hizo ganar mucho dinero»