La decisión de Argel de volver a enviar un embajador a Madrid tras 19 meses de crisis diplomática entre ambos países, ha pasado algo desapercibida en España, pero es noticia en varios medios de todo el globo. Se señala que el restablecimiento de los lazos diplomáticos puede interpretarse como un «deshielo» y un «primer paso» para la normalización de la relación bilateral entre Argelia y España. Se recuerda que la decisión de retirar el embajador fue tomada por Argelia, 24h después de anunciarse el cambio de posición de España sobre el Sahara y el gobierno argelino centró su reacción, que también incluyó un bloqueo de las relaciones comerciales y las exportaciones en la figura de Pedro Sánchez Y se señala las perspectivas de que el líder socialista se mantenga en el poder como uno de los motivos de Argelia para avanzar hacia el fin de la crisis.

La prensa marroquí por su parte también se hace ampliamente eco del nombramiento de un nuevo embajador argelino en Madrid y lo interpreta como una señal de «derrota» del gobierno argelino en el pulso diplomático planteado contra España. En este sentido se celebra que Argelia no ha tenido éxito en su «fantasmagórico objetivo» de cambiar la posición española sobre el Sahara -que aseguran «reconoce la marroquinidad» del territorio- y se subraya que «no ha obtenido ninguna ganancia».

Le Monde apunta que el regreso del embajador argelino a España es el primer paso hacia el fin de la crisis diplomática. El diario francés, en una noticia que firma Sandrine Morel, subraya que tras permanecer vacante durante más de año y medio, el puesto de embajadore de Argelia en Madrid va a ser nuevamente ocupado. Apunta que es aún un poco pronto para saber si este nuevo nombramiento pondrá fin a la crisis bilateral entre ambos países, pero cita a una fuente del gobierno español que se muestra optimista y habla de «primer paso significativo» por parte de Argelia. Recuerda que desde hace 19 meses las relaciones políticas y comerciales de España y Argelia se vieron «envenenadas» por la decisión del gobierno español de apoyar el plan marroquí para el Sahara Occidental, con la que Pedro Sánchez intentaba poner fin a la larga crisis diplomática con Marruecos. Pero apunta que esto supuso enemistarse con el gobierno argelino que apoya al Frente Polisario en este conflicto y se tradujo en el bloqueo de las exportaciones españolas, que cayeron un 46%, subida del precio del gas y reducción de vuelos comerciales.

Le Point subraya que Argel y Madrid van hacia un deshielo de relaciones. El semanario francés resalta en una crónica de su corresponsal Adlene Meddi, que tras 19 meses de crisis diplomática entre España y Argelia, las cosas parecen encaminarse hacia una mayor calma. Explica que Argel ha decidido nombrar nuevo embajador en Madrid, tras retirar el que tenía el 19 de marzo tras el apoyo del gobierno al plan marroquí para el Sahara. Y subraya que esto supone el inicio de la normalización de relaciones tras el impacto económico que ha tenido la crisis reduciendo en más del 80% las exportaciones españolas a Argelia que afectó a centenares de empresas de ambos países. Recuerda que Argel concentró su malestar en la persona de Pedro Sánchez y condicionó el restablecimiento de relaciones a una salida del gobierno del presidente socialista. Pero enfatiza que el adelanto electoral del 23J y los acontecimientos posteriores que evidencia que Sánchez puede seguir han «desinflado» el disgusto argelino, lo que unido a algunas decisiones recientes del gobierno español, como rechazar dar a Marruecos el control del espacio aéreo del Sahara y el discurso en la ONU en onde no se mencionó el plan marroquí han motivado el deshielo.

Jeune Afrique subraya el regreso de un embajador de Argelia en España tras una larga disputa diplomática. El digital norteafricano recoge que el gobierno de Argel que llamó a consultas a su embajador en Madrid el pasado 19 de marzo de 2022, ha pedido luz verde al gobierno español para nombrar un nuevo representante diplomático. Añade que la identidad del mismo se va a decidir en las próximas semanas en el Consejo de Ministros de Argelia, aunque algunas fuentes indican que podría ser Abdelfetah Daghmoum, antiguo nº2 de la embajada en Madrid. Y enfatiza que esto pone fin a más de 19 años de enfado de Argelia y conflicto bilateral con España, por el cambio de posición sobre el Sahara Occidental, que incluyó también la congelación de intercambio comerciales con un severo impacto para muchas empresas.

Le 360 subraya que tras 19 meses de crisis, Argelia restablece las relaciones diplomáticas con España sin obtener ninguna ganancia. El digital marroquí recurre a la sorna y asegura que «con pena en el corazón», Argel ha anunciado que tendrá nuevo embajador en Madrid tras 19 meses de la «sonora ruptura» diplomática decidida por a junta argelina en reacción al apoyo de España a la marroquinidad del Sahara. Y sostiene que de esta crisis bilateral, Argelia ha salido «con las manos vacías y sin poder arrancar nada a España». Califica de «fantasmagórico» el objetivo de Argel de lograr un cambio de posición de Madrid en su «irreversible apoyo» al plan marroquí para el Sahara y considera que el nombramiento de un nuevo embajador pone fin al «laborioso pulso» planteado por Argelia que se salda con una «humillante derrota». Añade que para España, el regreso a la normalidad con su vecino argelino es «todo beneficios», ya que supondrá el levantamiento de las restricciones de Argelia a sus exportaciones y además ha evidenciado que el cambio de posición sobre el Sahara es «una decisión de Estado y no de un partido político en el poder».

Hespress plantea que el regreso del embajador argelino a Madrid puede verse como prueba del fracaso de la diplomacia de Argelia. El diario marroquí recoge que tras dos años de tensión diplomática entre Madrid y Argel, tras el reconocimiento del gobierno español de la «marroquinidad» del Sahara, se espera que Argelia vuelve a nombrar embajador. Pero se pregunta ¿cuáles son las verdaderas motivaciones de esta decisión? y si en el fondo esto ¿no evidencia el fracaso de la diplomacia argelina?». Y cita a observadores y expertos que señalan que Argelia habría sufrido varios reveses frente a Marruecos y se encuentraría en una posición diplomática delicada, por lo que buscaría «sanar sus heridas y recuperar su retraso diplomático restableciendo e incluso renovando sus relaciones con España». Aunque también apunta que en Rabat se baraja otras hipótesis: se recuerda que Argelia tendrá elecciones y nuevo presidente en 2024 e incluso que podría estar buscando una vía de reconciliación con Marruecos.

Yabiladi señala que tras 17 meses de ruptura a causa de Marruecos, Argelia quiere retomar los lazos con España en perspectiva de que siga Sánchez. El digital marroquí considera que la propuesta de Argel de un nuevo nombre para ocupar el puesto de embajador en Madrid evidencia el deseo de abrir una nueva página en las relaciones con España. Recuerda que en marzo de 2022, el presidente argelino Abdelmadjid Tebboune decidió llamar a consultas a su representante diplomático en España, 24h después de anunciar el apoyo del gobierno español de Pedro Sánchez al plan marroquí de autonomía para el Sahara. Subraya que tras la ruptura, Madrid mantuvo la mano tendida a Argel para retomar las relaciones pero sin hablar de revisar su posición sobre el Sahara. Y enfatiza que la decisión de Argelia de restablecer los vínculos con España se produce en un momento en el que Pedro Sánchez parece encaminado a volver a liderar el gobierno en los próximos años.

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«Un camino que se toma por conveniencia política también puede ser el adecuado». Con este subtitulo, resume el editorial del prestigioso diario británico su análisis de lo que supondría para España, aprobar la amnistía al independentismo catalán que está negociando Pedro Sánchez a cambio del apoyo de Junts y ERC a su investidura. Hay en el texto críticas para todos los implicados. A los independentistas les reprocha haber «destrozado» Cataluña y polarizado al electorado, de Sánchez señala que sólo negocia la amnistía porque es el precio para seguir en el poder y al PP le advierte de que se está metiendo en un callejón sin salida con las rimbombantes acusaciones de traición y siguiendo el discurso de la extrema derecha. Pero defiende que aunque se trata de una apuesta arriesgada, la amnistía a los independentistas «merece la pena» y puede ser la política correcta para Cataluña y España porque las fisuras creadas «nunca se resolverán únicamente con la actuación de los fiscales y los tribunales».

El Financial Times resalta que el procés de hace seis años «destrozó» Cataluña, desató una reacción nacionalista en toda España y sigue agitando la política española, polarizando al electorado y dificultando que se forme un gobierno estable. Pero subraya que tras el 23J, Pedro Sánchez necesita el apoyo de los partidos independentistas catalanes para lograr su investidura y el «precio» que piden es la amnistía todos los que participaron en el 1-O. Apunta que el hecho de que Sánchez esté negociando esta medida de gracia indigna «a muchos españoles todavía furiosos por lo que consideran una traición catalana» y genera división entre los juristas sobre su constitucionalidad. Y añade que existe la percepción de que el presidente socialista sólo sigue este camino porque se juega su puesto, lo que aumenta su imagen de político «capaz de hacer lo que sea por seguir en el cargo».

Pero el editorial enfatiza: «Es una política de conveniencia. Sin embargo, también es la correcta para Cataluña y para España». Y sostiene que el independentismo catalán ha generado en estos años «enormes fisuras políticas y sociales que nunca se resolverán únicamente con la actuación de los fiscales y los tribunales. Requiere diálogo político y debate democrático». Y en este sentido subraya que Esquerra -al que define como «el más moderado de los dos partidos secesionistas» ya ha abandonado la unilateralidad y cree que si se convenciera «al más duro» Puigdemont y a Junts  de hacer lo mismo, «sería un gran paso adelante».

Sobre Pedro Sánchez, el diario británico asegura que «ya merece crédito» por haber rebajado la temperatura de la cuestión catalana, «una hazaña nada fácil en el sobrecalentado ambiente político español».  Y menciona en este terreno los indultos a líderes independentistas que aliviaron tensiones en la sociedad catalana y «no revalidó ni revigorizó la causa, como predijeron los críticos». Recuerda también que aunque la derecha considera que una amnistía a los independentistas catalanes es «una aberración que corrompe el sistema judicial y vulnera la igualdad ante la ley», España ya aprobó amnistías en el pasado y el argumento del interés público en este caso es convincente. Y envía un dardo a la derecha advirtiéndole de que «la rimbombancia» sobre la traición «es un callejón sin salida político para el PP que sólo piense como la extrema derecha». Finalmente asegura que aunque Sánchez se juega mucho con su oferta de amnistía «es una apuesta que merece la pena, aunque no sea del todo por las razones correctas».

The Financial Times es un diario británico considerado referencia mundial en información económica.  Se fundó en 1888 y desde julio de 2015 pertenece a Nikkei, el mayor grupo editorial japonés, que lo adquirió de Pearson su dueño durante 58 años. Tienen mayor circulación en el extranjero que en el Reino Unido y desde 2012 tiene más suscriptores on line que en papel. En marzo de 2022 ha alcanzado el millón de suscriptores digitales (en 2019 ya había superado la barrera del millón de lectores de pago, combinado papel y on line) que sumados a las casi 120.000 suscripciones en papel, le dan la mayor audiencia de su historia. Su website recibe más de 2 millones de visitas cada día de media y se calcula que llega a 26 millones de lectores al mes. El FT defiende el libre mercado y la globalización. En cuanto a su línea ideológica está considerado de centro o centro-derecha, pero ha respaldado a políticos como Thatcher, Reagan o Cameron y también a Gordon Brown o Obama. Se considera que sus editoriales suelen ser pro-europeos y pro-eu.

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