Los principales medios extranjeros se hacen eco de la expropiación de cuatro filiales de la empresa española ordenada por Evo Morales. Pero señalan que las nacionalizaciones de recursos son habituales en Bolivia y que Iberdrola es la enésima compañía extranjera afectada. La prensa boliviana apunta que la medida ha sorprendido por no ser en 1 de mayo, recoge las reclamaciones españolas y habla de presiones.
Financial Times recuerda que Bolivia tiene une tendencia histórica al nacionalismo de los recursos y que el de Iberdrola es el último revés para una empresa extranjera. Explican: «Evo Morales, el presidente de izquierdas de Bolivia, ha nacionalizado dos compañías de distribución electrica pertenecientes a la española Iberdrola para mejorar los suministros rurales. El Gobierno español declaró que ??lamentaba? la medida boliviana, destacando que la nacionalización no sólo afectaría a los accionistas españoles, sino también a los norteamericanos y argentinos. Este es el último de una serie de reveses para las empresas extranjeras que operan en Bolivia, un país con una tendencia histórica del nacionalismo de recursos».
Recuerdan que empresas españolas como Telefónica, Repsol o Iberdola han invertido mucho en América Latina y obtenido buenos beneficios, pero apuntan: «Las expropiaciones muestran que las altas tasas de crecimiento de América Latina también vienen con un alto riesgo«.
El Wall Street Journal habla de nacionalizaciones periódicas en Bolivia y destaca las operaciones de Iberdola alli eran menores. Explican: «Evo Morales, nacionalizó dos empresas electricas controladas por españoles durante el fin de semana en su última medida para ejercer el control estatal sobre las industrias que considera estratégicas para el desarrollo económico del país. Desde que asumió el poder en 2006, Morales ha nacionalizado la industria del petróleo y el gas y expropió las empresas de propiedad de inversores extranjeros en los sectores de telecomunicaciones, minería y electricidad.
Morales dijo que su gobierno ofrecería una compensación a la anterior accionista de las cuatro empresas, la española Iberdrola dentro de los 180 días hábiles. Las operaciones de Iberdrola en Bolivia representan una pequeña porción de sus ingresos totales y beneficio. Si bien las nacionalizaciones sorpresivas son una característica habitual de la vida política y económica de Bolivia, el 2012 ha sido un año especialmente activo en ese frente. Los analistas dicen que la inclinación de Morales por expropiar periódicamente los activos de propiedad extranjera sigue siendo un obstáculo para la inversión extranjera directa.»
The Times dice que España grita «falta» tras la expropiación. Su artículo resalta que España está buscando una indemnización después de que Bolivia nacionalizara cuatro filiales de Iberdrola en el último intento del presidente Morales de aumentar el control estatal sobre los recursos energéticos y minerales. La sede de Iberdrola en La Paz ha estado bajo custodia policial armada tras decretar Evo Morales la incautación de Electropaz, que distribuye energía a 470.000 clientes, y Elfeo, que abastece a 80.000. Bolivia también se apropio de dos empresas pequeñas propiedad de Iberdrola, que ha estado operando en el país desde que compró las redes de distribución en los años noventa entonces pertenceientes a norteamericanos.»
The Washington Post detalla como Bolivia expropia filiales de una eléctrica española. Su articulo explica que «el sábado, en una ceremonia pública, el Presidente Evo Morales nacionalizó las filiales de distribución eléctrica de la empresa energética española Iberdrola SA. El decreto leído por Morales contempla también que Iberdrola reciba una indemnización después de que una empresa independiente contratada en un plazo de 180 días determine el valor de los activos nacionalizados.»
La Stampa señala «no hay dos sin tres» en referencia los casos de Repsol y REE. La crónica de Gian Antonio Orighi asegura: «No hay dos sin tres. Después de la nacionalización, en marzo, del 51% que la petrolera española Repsol poseía en Ypf, por parte de la Argentina de la progresista presidenta Cristina Kirchner, y de la expropiación, en mayo, de la eléctrica Tde, controlada por la estatal íbérica Ree, por parte de la Bolivia del presidente socialista boliviano Morales, ayer el gobierno de La Paz ha repetido confiscando las acciones de cuatro filiales de la madrileña Iberdrola.»
El Diario destaca que Iberdrola pide 75 millones de euros de compensación. El decano de la prensa boliviana asegura: «El Presidente dijo que durante cuatro meses se pidió a la empresa, que se rebajen las tarifas. Iberdrola recibió la medida con sorpresa y quiere una indemnización justa. La empresa española espera conocer los detalles del decreto y por el momento pide como indemnización 75 millones de euros (aproximadamente 100 millones de dólares). La medida expropiatoria podría tener un mayor alcance, incluso llegando a afectar a otras empresas españolas y extranjeras.»
Los Tiempos apunta que la acción de Morales ha sorprendido y recoge las críticas españolas a la expropiación. Explican: «De manera sorpresiva y en una fecha distinta al 1 de mayo, el presidente Evo Morales decretó la expropiación de las acciones de la firma española Iberdrola en las distribuidoras de electricidad Electropaz y Elfeo». En una crónica de este 2 de enero señalan: «El País, considerado como el principal diario español, asegura en uno de sus editoriales que el presidente boliviano Evo Morales nacionalizó las cuatro filiales de la española Iberdrola en La Paz y Oruro para satisfacer a su electorado cocalero.»
La Prensa dice que la nacionalizacion fue por presión de sectores. Aseguran «La ministra de Comunicación de Bolivia, Amanda Dávila, reconoció a un medio español que su Gobierno fue presionado por las organizaciones sociales para asumir la decisión de nacionalizar las acciones de cuatro filiales de la empresa Iberdrola, siendo importantes las distribuidoras de electricidad de Oruro, ELFEO, y La Paz, Electropaz.`Hace mucho tiempo ya había una demanda de parte de los sectores populares, de municipios pobres, expresando al Presidente la necesidad de adoptar alguna política de abaratamiento de las tarifas, de rebaja de las tarifas´.»