Internet opina: «La TDT está revelando el final de la televisión»
El apagón analógico en España ha provocado un gran volumen de comentarios en la Red, en su mayor parte críticos. Unos se quejan de la vertiente técnica de la TDT -costes de la adaptación, aparatos que ya no sirven, zonas sin cobertura.,…- pero otros apuntan más al fondo: a la calidad de la programación. La periodista Rosa María Artal explica en su blog y para radiocable.com que ve la llegada de la TDT como una copia pobre de Internet que augura el final de la televisión por la pobreza de la programación.
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Para Rosa María Artal, la TDT no mejora los contenidos de la televisión actual. Incluso los empobrece, porque las mismas cadenas repiten la programación una y otra vez. Y critica que fuera de las grandes cadenas, lo que se ve en la TDT son «debates que no son debates» de gente que opina. «Eso es muy barato llevar a gente sentada pero no es televisión, eso es radio televisada».
La periodista considera que todo esto augura un mal futuro a la televisión que «se muere» ya que está dirigida a un público mayor: «tengo la sensación que la gente menor de 40 años apenas ve la televisión». Rosa María Artal cree que el medio quedará sólo para los grandes acontecimientos, sucesos y telediarios.
En la red otros muchos blogs tratan el tema de la TDT:
Juan Varela en Periodistas 21 considera que ha sido una «transición acelerada para ser los primeros en el apagón, aunque eso nos deje en tinieblas digitales mientras otros países dan pasos más tranquilos pero seguros hacia la convergencia de televisión, internet y los nuevos servicios de las redes de banda ancha.
Javier Perez de Albeniz en El descodificador cree que con la TDT hay menos transparecenia, más confusión y peor televisión: «Si usted ve la actual programación de Net Televisión o Veo Televisión (las televisiones de ABC y El Mundo, respectivamente) seguramente no entenderán para qué necesitan más canales. Tienen serios problemas para rellenar 24 horas de programación. Y el 99% de ese relleno es basura.»
Nacho Escolar opinaba hace unos meses sobre la TDT «cuando la oferta se dispara, es la demanda quien pone las reglas; puede que en el menú del día ganen los macarrones con chorizo, pero la cosa cambia cuando se puede pedir a la carta. Las minorías ascienden a taquillazos mientras que las superestrellas, como Oprah, se transforman en canales. Porque todos somos contingentes. Pero tú, querido telespectador, al fin eres necesario.»
Victor Colemenarejo en su blog Crónicas Mundanas cree que con la TDT ganan sobre todo los vendedores de televisores y antenistas. Y sobre la programación reflexiona: «¿Qué le aporta la TDT a mi abuela? 15 nuevos canales fantasma: teletienda, curas y tertulias amateur. En cambio, ya no podrá sintonizar uno de los pocos programas que le gustaban, que veía en el canal regional de una Comunidad vecina.»
Jose Luis Vazquez en Twitter se mostraba sarcástico comparando ambos modelos: «Quiero 10 buenas ventajas de la TDT frente a la analógica… bueno, me vale con 3… oh wait».
Pepe Contreras habla en su blog de otro aspecto de la TDT en Andalucía: «Esta reconversión digital no ha recibido compensación alguna o ayudas por parte de la Administración, cerrojazo y punto. Pero se han perdido más puestos de trabajo que tras las deslocalización de Delphi.»
Victor Deumal en Vaya tele critica que haya que pagar una fortuna para ver algo que en teoría es gratis: «miles de vecinos de Lugo tienen que echar mano de la TDT vía satélite para no quedarse a dos velas. Y como estos de Lugo, sospecho que miles de vecinos en toda España. Es el precio del apagón analógico, que en casos como este bien podríamos rebautizar como anailógico.»
En el blog La Roca de Benet consideran que sólo sirve para hacer más cara la misma TV: «no me parece tan bien es que se utilice la tecnología para sacar las perras a todo dios a cambio de absolutamente nada, porque la TDT no sirve absolutamente para nada, sólo para que unos cuantos se enriquezcan a costa de la mayoría, un nuevo impuesto mascarado en mejoras en la calidad televisiva».