Joan Ferran es portavoz adjunto del PSC en el Parlament de Catalunya y, dicen, mueve los hilos de la calle Nicaragua de Barcelona. Tras publicar ??Maleïda Crosta?, una novela en la que una estudiante de Ciencias Políticas se acaba encariñando con el portavoz parlamentario de su Grupo, el diputado catalán nos recibe en su despacho.
-Por hablar algo del libro. La protagonista para entender que se puede ser de izquierdas y pragmático se acaba acostando con el portavoz del PSC, pero en dos minutos… ¿Cómo me lo explica?
-Cuando alguien llega a la política lo hace por ideales, pero la gestión del día a día es muy complicada. Si un alcalde intenta peatonalizar una calle, intenta que la gente pueda pasear, que la gente pueda dormir tranquila… Este alcalde sabe que para hacer aquello que sería bueno para la población, va a tener que pagar un precio y es que una serie de comerciantes le van a decir que les va a perjudicar a sus negocios. El alcalde, en el momento de tomar la decisión, a lo mejor, no lo toma con la pureza de lo que debía ser… Al final, tiene que peatonalizar la calle, pero a lo mejor tiene que abrir a unas horas. No hará lo que sería ideal, pero hará un mixto. ¡Eso es el pragmatismo!
-Si, pero dicen la izquierda ha perdido su esencia para ser pragmática y ha aceptado el sistema económico de los liberales.
-El socialismo no hubiera podido seguir con el discurso de la autogestión de hace 30 años en un momento en el que los trabajadores querían ser considerados asalariados, clases medias, etc.. En un momento en el que hay una fragmentación de lo que han sido antagonismo muy claros, la izquierda, si quiere seguir transformando la sociedad, se tiene que acoplar a los sectores sociales que representa. La crudeza de una ideología viene matizada por la realidad. Ahora bien, ahora que el neoliberalismo se resquebraja es un buen momento para que la izquierda critique algunas cosas. El problema de la izquierda es que se debe ir adaptando a la realidad.
-Ya, pero, al final, dicen los críticos, la izquierda siempre acaba adoptando el discurso de la derecha…
-El problema no está en adoptar el discurso momentáneo de algunas cosas que no puedan ser propiamente de izquierdas, sino, no perder la perspectiva a largo plazo. Lo que sería nefasto para la izquierda es gobernar solo para el día a día sin pensar en la perspectiva a medio plazo para tener igualdad, derechos humanos… Si la izquierda, que es transformadora, se queda en el día a día, es fatal. La izquierda ha de intentar que las generaciones de dentro de 40 años vivan mejor que tú.
LA «CROSTA NACIONALISTA»
-Desde que usted habló de la ??crosta nacionalista? de los medios catalanes hasta la publicación de este libro, ha cambiado algo?
-Sí, cuando se denunció el tema había una sedimentación de personas, conceptos y estereotipos en la radiotelevisión publica: los nombramientos se hacían de forma directa y el presidente nombraba al director de la televisión. En la actualidad no es así, de modo que se desgubernamentalizan y democratizan los medios públicos
-Pero, ¿sigue habiendo ??crosta? en TV3?
-No
-El hombre del tiempo sigue hablando del Estado español o dels Païssos Catalans.
-Es un aspecto complementario del tema. Durante 23 años también ha habido una sedimentación de conceptos. En un mapa del tiempo se deberían ver accidentes físicos y, sin embargo, una determinada concepción nacionalista de un medio hace que se le ponga una frontera virtual a ese mapa. Actualmente, más allá del dominio lingüístico catalán, que es indiscutible, lo que se pretende es la plasmación de un planteamiento político al hablar dels Païssos Catalans.
-Y entonces dice usted que TV3 debe ser una televisión pública nacional, pero no nacionalista. A una persona de Madrid cómo le explica esta diferencia.
-El concepto ??nación? es un concepto que llevamos desde el siglo XVIII discutiéndolo. Parece ser que se habla de nación cuando hay un colectivo de gente que forma parte de un hecho identitario diferencial. Cataluña tiene definido en su Estatut que es una nación, la mayoría nos sentimos de una nación diferente de otra y lo que ocurre es que mas allá de esta conciencia, hay alguien que ha intentado a través de los medios acrecentar los mitos legendarios de la nación, como cuando alguien recrea epopeyas épicas del pasado en televisión. Lo cierto es que nos está haciendo un flaco favor porque se inventa un pasado y habla de algo ficticio… Yo lo que digo de una televisión publica es que no debe proyectar una cosmovisión de un universo simbólico que, en realidad, es artificial.
-Y cómo puede compatibilizar sus principios, no nacionalistas, con los de un partido que, a lo mejor, puede tenerlos, y estar en el mismo Gobierno?
-Hay un programa común y sobre él se pacta un programa de gobierno. Una vez allí, te mueves dentro de ese parámetro, independientemente de que el horizonte estratégico sea diferente… Mi horizonte estratégico es una España federal, con mucho autogobierno para Cataluña, pero para todos los Estados que formen el Estado español… El horizonte de ERC es de segregación. Lo mío es de a bajo hacia arriba, cada vez sumando más hasta un mundo ideal confederado.
¿PROBLEMAS LING?ISTICOS?
-La inmersión lingüística no es mala, pero se puede mejorar…
-La gente habla catalán y castellano indistintamente. Ha ido bien durante un montón de años y no ha habido problemas hasta ahora, cuando dos partidos lo han puesto sobre la mesa. Cuando Mariano Rajoy era ministro de Educación había inmersión lingüística y aquí nadie decía nada. Es más, se habla mejor castellano… ¿Dónde está el problema? Bien, si alguien quiere tener algunos votos, utiliza el tema.
-Pero parte de lo que dice lo podría compartir la gente del PP. No hay un problema social con el idioma, sino que es institucional.
-Castellano y catalán están en igualdad de condiciones. De hecho, el catalán no ha conseguido su total normalización y habrá que hacerlo. ¡Como habrá que hacerlo con el inglés! Durante unos años se ha llevado medianamente bien, pero se ha tratado de manera perversa por algunos partidos…
-Usted ha hablado alguna vez de xenofobia en el nacionalismo. Por ejemplo cuando Felip Puig puso en duda la catalanidad de Montilla por haber nacido en Andalucía…
-¡Eso es una declaración xenófoba! Acabar con ello es difícil, porque hay gente que vive y siente estos temas así.
-Está diciendo que hay xenofobia en el nacionalismo, pero cuando lo hacen en el PP le llueven las críticas.
-La misma palabra dicha con dulzura o agresividad cambia los significados. El tema lingüístico tratado desde una óptica racional, puede ser discutido… Sin embargo, tratando la lengua como un arma arrojadiza, no se puede hacer.
ESPA?A FEDERAL Y FINANCIACI?N
-¿Se están dando pasos hacia la España federal?
-¡Espectaculares! No tan solo respecto al avance de lo que es el Estado de las autonomías, sino a la aceptación de lo que proponemos en la propia izquierda española.
-¿Dónde?
-Usted coge al PSOE de hace 25 años y le dice lo que se estaba diciendo ahora desde Cataluña y no lo hubieran entendido. Se ha hecho una pedagogía, se ha ido avanzando y se ha empezado a hablar de la España nación de naciones, de la España plural… De forma paulatina se ha ido avanzando.
-¿Y no es un problema? Ahora todo el mundo dice ??¿¡y qué hay de lo mío!??
-Esto es lo que no me preocupa. Me parece magnifico que los andaluces digan que quieren el mismo autogobierno que Cataluña o el País Vasco… Cataluña siempre ha jugado un papel de motor de cambio y, de hecho, no habrá financiación si Cataluña no lo cierra antes que nadie.
-Sobre este tema dicen que les han tomado el pelo 3 veces… ¿Por qué no hay acuerdo?
-Porque no nos han tomado el pelo. Si nos hubieran tomado el pelo…
-Hubieran aceptado la primera propuesta.
-Sí, que es lo que hizo CIU. La nueva financiación va a estar a años luz de lo que consiguió CIU.
-Pero, ¿se atreven a dar alguna fecha?
-No, pero creo que la fecha está cercana.
-Sí, pero eso también lo decían en septiembre.
-Sí, pero ahora lo sabemos con mas convicción. La oposición debería estar contenta porque este Gobierno no firma a cualquier precio, sino que se hace de rogar.