El Financial Times publica un especial sobre nuestro pais en el que se ha incluido una columna invitada. Antonio Garrigues escribe allí: �??Una economía resistente debe evitar los escollos políticos�?�

�??Si queremos salir de la crisis con un mínimo de dignidad, tendremos que hacer dos cosas: primera, crear un ambiente de moralidad pública radicalmente distinto del que ha predominado hasta ahora y, segundo, castigar con penas de cárcel a los responsables de la catástrofe mundial. En lo que respecta a España son muchos los comentadores extranjeros y españoles que magnifican los problemas del país y predicen incluso cosas peores y más duraderas. La crisis española se debe a la caída de una masiva industria inmobiliaria. La corrupción en el sector inmobiliario llegó a cotas deplorables con la colaboración, consciente o no, del sector público y de instituciones financieras que buscaban inflar la burbuja, a pesar de que muchos de los implicados eran completamente ajenos a la severidad o al daño que podrían causar. Ciertamente, no es la primera crisis de la propiedad que hemos sufrido y, al igual que otras anteriores, será resuelta de una manera razonable�?�.

�??Nuestro mayor problema no es ni económico ni social. La radicalización de la vida política española se ha convertido en un deplorable espectáculo que no está afectando desfavorablemente al sentimiento público, sino que también retrasa las medidas reconstituyentes que necesitarían adoptarse. Sin diálogo social o político, las cosas pueden llegar a ser aún más difíciles. Tan pronto como los políticos acepten que el hay que el interés público pesa más que los intereses de partido, desaparecerán desacuerdos superficiales. Cuando se llegue a este entendimiento, comenzará una nueva era de crecimiento más fuerte y sostenible�?�. [read more]

Reiner Wandler publica un texto en el periódico alemán Die Tageszeitung titulado: �??¿Obama? ¡Nosotros tenemos a un rey que hace vela!�?�. Se refiere a la Candidatura Olímpica de Madrid 2016: �??Madrid también quiere hacerse con los Juegos Olímpicos de 2016: la ciudad se presenta como candidata ya por segunda ocasión e intenta ganar puntos en tiempos de crisis económica ante todo con una financiación aparentemente asegurada�?�. Según el texto, «el mayor problema de la candidatura española son los propios españoles. Junto a los griegos, son los más reacios al deporte. Prácticamente no hay deportes de masas»

�??Al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, no le falta la confianza en sí mismo. �??¿Que viene Obama? Genial, eso aumenta la tensión�?�, fue la reacción del extremo izquierdo de los conservadores españoles cuando un reportero le comunicó que el mismísimo presidente estadounidense presentaría personalmente la candidatura de Chicago en Copenhagen. Madrid no tendría por qué esconderse. No en vano, la capital española cuenta con el Rey Juan Carlos I: el único capaz de hablar �??de tú a tú�?? con los representantes del movimiento olímpico, puesto que él mismo participó en una ocasión en un campeonato olímpico de vela. Ruiz-Gallardón intenta entusiasmar a los españoles con su optimismo. Desde hace meses, el alcalde se pavonea por el país como si ya hubiese obtenido la adjudicación. �??Madrid cuenta con el mejor proyecto�??, asevera sin cansancio. La capital de España �??ya ha hecho sus deberes�??�?�.

�??Según informaciones oficiales, el 77 por ciento de las instalaciones necesarias ya han sido construidas o se encuentran en proceso de construcción. Muchas de ellas ya fueron concluidas hace cuatro años, cuando Madrid se presentó por primera vez como candidata a los Juegos Olímpicos. En aquella ocasión, el optimismo de Ruiz-Gallardón se disolvió completamente en tan solo unos minutos. Pero el alcalde no se rindió: ese mismo día comenzó a hablar de 2016. Pero la candidatura también tiene sus puntos flacos: la ciudad cuenta con una buena red de transporte público urbano, pero faltan los carriles para bicicletas. Madrid es una ciudad de coches. En pocas ciudades europeas el aire es tan malo como aquí. Pero el mayor problema de la candidatura española son los propios españoles. Junto a los griegos, son los más reacios al deporte. Prácticamente no hay deportes de masas�?�.

La afirmación es extraña habida cuenta de que tanto fútbol, como baloncesto, como tenis, como natación sincronizada, como Fórmula1, son algunos de los grandes estandartes de nuestro deporte. No solo eso, sus protagonistas se han convertido en embajadores de nuestro país.