Rajoy se equilibra en el PP, para tranquilidad de ZP
Respecto a la lectura local, se puede decir que el resultado es tranquilizador para Zapatero en la medida en que Rajoy seguirá siendo líder del PP. Eso mantiene a su partido en tensión, dividido. Un escenario muy diferente sería que hubiera caido dejándole el relevo a Gallardón, por ejemplo, o a Rodrigo Rato. Eso sí que sería para preocuparse…
Porque la situación es tensa. El PP solo ha sacado un punto más que en las anteriores elecciones europeas. Estará muy bien una victoria, de cara a la moral de la tropa, -siempre es mejor que una derrota, desde luego- pero un punto es lo que es.
Para Rajoy, se trata de una victoria amarga y para Esperanza más. Me sorprendió anoche escuchar a Luis Herrero, eurodiputado saliente del PP, criticándole duramente. Según el periodista, el resultado no legitima a Rajoy como líder y mantiene la tensión en el partido: «La cifra de votos no garantiza tranquilidad alguna para Mariano Rajoy. No desactiva su oposición interna», vino a decir. Algunos tertulianos se preguntaban esta mañana ¿entonces ganó Rajoy, o Esperanza y Camps juntos?…
Lo explica bien Nacho Escolar:
«El resultado de ayer es lo bastante amplio como para que Rajoy duerma tranquilo pero no tan contundente como para tumbar a Zapatero. En el peor momento de la peor crisis económica en décadas, con cuatro millones de parados, una participación bajísima y una campaña hosca y marrullera, el PP sólo ha sido capaz de ganar por tres puntos y medio; no es como para tirar cohetes. Mayor Oreja no obtiene más apoyos de los que consiguió en el 2004; es el PSOE el que pierde más de 700.000 votos en un momento donde su electorado se juega poco.»
Es cierto que el electorado del PSOE se desmoviliza, pero el PP apenas ha logrado trasvase de votos. Sus cifras siguen siendo malas en Cataluña, Pais Vasco y por supuesto Andalucía. El mapa electoral nacional es parecido a como estaba antes y extrapolar eso a unas elecciones generales es demoledor para la derecha. Pues con ese mapa no se ganan elecciones.
A mi personalmente lo que más me inquieta es que el PP haya sido inmune a la corrupción. Sin duda eso demuestra que aquellas cosas que al electorado del PSOE incomodan mucho, al electorado del PP no lo hacen. El PSOE debería preguntarse por tanto ¿cuales son entonces las cosas que el votante del PP no tolera?, porque obviamente no son las mismas.
Sin duda la derecha está muy movilizada. Pero además hay que reconocer que saben elaborar una promesa atractiva para la gente, pues de lo contrario no saldrían elegidos. Incluso cuando aquellas decisiones afectan negativamente a la vida de los trabajadores reciben sus votos, ¿por qué sucede? La izquierda debería preguntarse ¿que prometen? ¿como lo hacen?