El de los Casinos es un sector en profunda transformación, entre otras cosas por la irrupción del juego en Internet, que lo ha dinamitado todo. Eso hace que sus prometedores beneficios sean, por lo menos, dudosos.
Unos datos sobre tan formidable negocio:
El Casino de Arajuez anunció en julio la aplicación de un ERE temporal a 190 trabajadores, como consecuencia de las perdidas económicas.
No es un caso aislado. En abril, el Casino de Torrelodones despidió a 36 empleados con la reforma laboral. La empresa alegó que los ingresos han caído un 45% en tres años
Lejos de su formidable propaganda, los Casinos están considerados como un lastre para la economía de EE UU. Según Stephen Miller, de la Facultad de Empresariales de la Universidad de Nevada: florecieron desbocados durante la bonanza del ladrillo y el crédito fácil y cayeron en picado cuando la burbuja inmobiliaria estalló:
El 12% de la población activa del Estado de nevada está en paro, 4 puntos por encima de la media nacional. («La cifra real de paro y subempleo en EEUU ronda el 16%» El mundo. 1-6-2012)
1 de cada 16 propiedades ha sido embargada en Nevada, frente a 1 de cada 69 en EE UU.
El 58% de los nevadenses debe más al banco de lo que vale su propia casa.
Nevada dependía en gran medida de la construcción. Cuando la crisis estalló en 2008, el Estado perdió 2/3 de los empleos de la construcción en tres o cuatro años. De los 150.000 empleos que había en ese sector pasaron a 50.000
CityCenter, un complejo que engloba al casino Aria, los hoteles Mandarin Oriental y Vdara, las torres residenciales Veer y el centro comercial Crystals. (MGM Resorts International), iba a costar 4.000 millones de $ y se acabó en 2009 por 8.500. En 2010 su valor patrimonial se tasó en 2.650 millones, un 31% del coste real.
Lo último en esa delirante ciudad creada en mitad del desierto de Nevada es Machine Guns Vegas, «una inmensa galería de tiro con azafatas e instructoras de lo más sexy», contaba el periodista Javier Valenzuela. Allí puede disparase con fusiles y metralletas de ayer y de hoy (desde la vieja Thompson al último Uzi) sobre blancos que representan a personajes como Bin Laden, Sadam Husein o Gadafi.
Tampoco la experiencia española en este ámbito debe ser motivo para confiar. En 2007 se presentó por todo lo alto un proyecto similar en Los Monegros. También vino rodeado de exigencias: se pidió el dinero, cambiar la ley del juego (que autorizaba un máximo de un casino por provincia), recalificar 2.025 hectáreas de terreno, y llevar agua, tendido eléctrico y redes de saneamiento hasta Los Monegros, un desierto. El primer Casino debía abrirse en 2014. De ese proyecto poco se sabe ya, a pesar de las palmaditas de las administraciones ?entre otras cosas porque Mark Campbell, uno de los escasos portavoces de ILD, está ahora mismo en la cárcel con Cadena Perpetua, en Inglaterra, condenado por el asesinato de su esposa.
El nuevo sector de negocio español tampoco provoca entusiasmo en Europa. La periodista Sandrine Morel se preguntaba recientemente en Le Monde ??Después de haber sido La Meca de la construcción, ¿se convertirá España en el templo del juego?» (Las Vegas megalo en Espagne).
Veamos ahora la reputación que precede al Señor Adelson, al que recibimos, sin embargo, con gran entusiasmo.
Los valores de Adelson son tan flexibles como sus actividades: «Se ha convertido en un gran defensor de los ultraconservadores, apoyando con cheques millonarios al expresidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrich en su fallida candidatura a la nominación presidencial republicana. Es la bestia negra de los sindicatos. Intentó que se detuviera a algunos manifestantes por protestar ante su casino. Según Wynn, su archienemigo y competencia empresarial, ??Sheldon es un hombre que alberga mucha animosidad hacia mucha gente? Y cuando se enfada, las cosas se ponen feas?
A falta de la contribución directa que pueda hacer a la campaña de Romney, el magnate y su mujer Miriam han donado 10 millones de dólares al comité externo de acción política que apoya a la misma («Super PAC», en inglés). En las primarias, Adelson y su mujer se gastaron 21,5 millones en apoyar a otro candidato republicano, Newt Gingrich, que abandonó la carrera en mayo.
Otros titulares interesantes:
5-8-2012 EEUU investiga si la empresa de Sheldon Adelson blanqueó dinero. Las autoridades de Estados Unidos están indagando si Las Vegas Sands blanqueó dinero durante varios años procedente de un empresario mexicano acusado de tráfico de drogas y de ejecutivo californiano encarcelado por sobornos, contó The WallStreetJournal
14-8-2012 Las autoridades de EE UU investigan los negocios de Adelson en China por posibles sobornos, cuenta El Pais