La Cafetera analiza la película Tal como éramos: “Las personas son sus principios“

 La Cafetera de radiocable.com analiza ‘Tal como éramos’, una película sobre el compromiso político y las distintas posiciones políticas ante la vida. Para Emilio Silva (ARMH) ‘Tal como éramos’ nos recuerda que «éramos memoria». Y destacaba la posición de la protagonista, Katie, como la representación de aquellas personas que «luchan y cambian las cosas» a pesar de verse en ocasiones «desconectadas del mundo». Una desconexión que incluso se introduce en su relación sentimental con Hubbell, quien entiende la política de un modo distinto, desde una posición más pragmática que Katie. Para quien «las personas son sus principios».

Mientras Hubbell representa el derrotismo ante las complicaciones e implicaciones de la política, Katie no pierde la esperanza en la lucha social: «Nunca habrá libertad si la gente tiene miedo a defenderla». A través de ella la película refleja «la repercusión que tuvo la guerra civil en todo el mundo». Así lo señalaba Silva, que ponía especial atención en los jóvenes de los años 30 «que vieron, incluso desde Estados Unidos, lo que significaba el fascismo como una amenaza al progreso de la humanidad». Un compromiso, el de los estudiantes, que les llevaba a recaudar «recursos para ayudar al gobierno de la II República».

‘Tal como éramos’ retrata un momento político en Estados Unidos. Al principio, cuando los protagonistas se encuentran en la universidad es la época de la segunda guerra mundial, «cuando no había ese rechazo tan frontal con el comunismo y Rusia». La periodista Pilar de la Peña destacaba así ese momento en que «hay respeto hacia Rusia», cuando eran aliados en la segunda guerra mundial. Y eso «lo refleja muy bien la película» con la liga comunista y los mitines de Katie. Aunque echaba de menos una mayor profundidad en «el tema de la caza de brujas de artistas de Hollywood», cuando empieza la Guerra Fría. Sobre eso mismo reflexionaba Celine, oyente del programa, que tras ver un documental sobre la propia película pudo saber que se habían recortado escenas. Y, entre ellas, echaba de menos las referidas a la caza de brujas. La que muestra en ocasiones la película con artistas y guionistas que pertenecieron a los movimientos de los años 30 y fueron perseguidos en los años 50.