Time sobre el IBI de la Iglesia: «La crisis puede conseguir lo que 33 años de democracia no han logrado»
La revista estadounidense destaca en un artículo de su corresponsal Lisa Abend los intentos por cobrar el IBI a la Iglesia católica en España. Aseguran que un acuerdo con el Vaticano, exime a la institución de pagar el impuesto sobre sus propiedades, pero detallan como ciudades y ayuntamientos buscan «lagunas» para poder cobrarselo a la Iglesia en estos tiempos de crisis y austeridad.
(Foto: Flickr/Janex&Alba)
Time explica que: «Tres leyes diferentes, incluyendo un acuerdo de 1979 con el Vaticano, eximen a la Iglesia Católica del pago del impuesto sobre bienes inmuebles en España. La misma disposición es válida para otras religiones y organizaciones sin fines de lucro como la Cruz Roja, sin embargo, dado que el catolicismo es la religión dominante en España, y debido a que las propiedades de la Iglesia, allí son tan grandes (España Laica estima que sin la exención, la iglesia tendría que pagar cada año entre 2,5 y 3 millones de euros en IBI), los críticos argumentan desde hace tiempo que el acuerdo supone un trato preferencial a la Iglesia Católica.»
Destacan como: «Es sólo ahora, sin embargo, con las medidas de austeridad empujando hacia abajo y un plan de rescate europeo que se avecina, cuando se ha empezado pasar de esas críticas a la acción. En otras palabras, la presión económica, bien podría lograr lo que 33 años de democracia no han sido capaces».
La revista detalla como «los malos tiempos cambian incluso las prácticas más arraigadas. En mayo, el opositor Partido Socialista se comprometió a modificar la legislación que garantiza los privilegios de la Iglesia y pidió a sus funcionarios municipales de todo el país que presentaran mociones para aprovechar las lagunas en las leyes. Aspe, Alcalá de Henares y Amoeiro han decidido cobrar el impuesto sobre las propiedades que no se mencionan explícitamente en el Concordato, como las que la iglesia alquila o no utiliza en absoluto». Y recogen también la reacción de Rouco Varela avisando que esta medida tendría efectos sobre otras acciones de la Iglesia como Caritas.